La Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) ha inaugurado este lunes oficialmente la 80 edición de sus cursos de verano con la idea de mantenerse como la "gran sede del diálogo universitario", "espacio de comunicación" y de "sociabialización", conservar su "visión crítica" y seguir pegada al "pulso de la sociedad".

Estos son, al menos, los "elementos de permanencia" que, según el ministro de Educación, Cultura y Deporte, José Ignacio Wert, conserva desde sus orígenes la UIMP, una institución que, a lo largo de su historia, ha pasado de los alumnos "con canotier y bastón" a ser "universidad 2.0".

Según ha dicho, la UIMP en estos años se ha mantenido como "celosa guardiana" de una "tradición de excelencia", "adelantada" a una nueva concepción del mundo universitario, y como "herramienta cada vez más poderosa" en la enseñanza del español como lengua extranjera, combinándola con la inmersión en inglés.

Durante el acto de inauguración, Wert ha opinado que la actividad de la UIMP ha seguido el "latido de las cosas verdaderamente importantes", yendo "más allá de lo anecdótico", buscando una "comprensión amplia" de su entorno.

Al "espectro temático" de la UIMP, el ministro ha resaltado la incorporación de nuevos formatos e iniciativas y, en este sentido, ha agradecido el "entusiasmo" del nuevo rector de la UIMP, César Nombela, para poner en marcha las mismas.

La intervención del ministro, ha venido precedida de la lección inaugural 'Cambio climático y desarrollo sustentable' a cargo del Premio Nobel de Química en 1995, el mexicano Mario Molina, que, además, ha recibido la medalla de honor de la UIMP.

Aprovechando las evidencias que existen sobre el cambio climático y el "consenso" de la comunidad científica, Wert ha señalado que cuando se intentan llevar a cabo "decisiones" basadas en "evidencia científica rotunda" resulta "muy frustrante" ser "incapaces" de trasladarlas a la opinión pública ya que la forma en que los medios "median" hace que lleguen "distorsionadas" a los ciudadanos.

La intervención de Wert ha estado precedida por la de Nombela en el que ha sido su primera intervención en una acto institucional, quien ha confiado en que los cursos sirvan para "aportar ideas y soluciones" a la sociedad y ha asegurado que su gestión continuará los "valores" de la "mejor tradición" de la UIMP, como son, entre otros, la proyección social e internacional, su excelencia académica y su carácter "flexible" y "plural", con los que —ha dicho— su "compromiso" es "total".

Nombela ha explicado que los ejes en los que fundamentará su gestión son los cursos avanzados, los programas de postgrado y la internacionalización en un ámbito multidisciplinar.

"simbolismo de estado" y "cantabrismo" de la uimp

Por su parte, el presidente de Cantabria, Ignacio Diego, ha destacado en su intervención el "simbolismo de Estado" que, a su juicio, siempre ha representado la UIMP, que, según ha dicho, "ha reflejado, en cada instante, lo que España aspiraba a ser, lo que quería conocer, y también seguramente nuestros defectos como país y como obra humana".

"Pero el deseo de aprender del diálogo cercano con los maestros, de conocer personas de otros lugares del mundo, y de abordar grandes cuestiones sociales de la actualidad, es el verdadero espíritu de La Magdalena. Y creo que, si España mantiene ese espíritu, podrá superar cualquier dificultad transitoria, siendo una sociedad abierta y reflexiva", ha apostillado.

Diego también ha reivindicado el "cantabrismo" de la UIMP y ha pedido al equipo rectoral de Nombela que la institución concentre en la región los "esfuerzos" porque "ésta es su cuna y su lugar óptimo".

Apoyo a wert

Por otra parte, el presidente regional ha comenzado su intervención instando al ministro Wert a que "siga en el ejercicio de esa labor sustentable, argumentativa y razonada de la defensa de determinados cambios que son necesarios en nuestra sociedad a pesar de determinados inmovilismos que tienden a procurar impedirlos".

En la misma línea, el alcalde de Santander, Íñigo de la Serna, ha expresado su apoyo al ministro de Educación y le ha ofrecido su "respaldo y colaboración" en lo que precise.

El regidor ha llamado a la "implicación seria y serena" de todas las instituciones para lograr la "sostenibilidad" de la "empresa cultural" que es la UIMP. Así, ha constatado el apoyo del Ayuntamiento a esta institución educativa porque "nada de los universitario le es ajeno".

Como universidad de "excelencia", ha ensalzado que esa cualidad ha de ser "un estado de ánimo en tiempos de desánimo", unos tiempos en los que, ha considerado, los responsables políticos tienen que "adoptar decisiones que, en ocasiones, ni son fáciles de adoptar por uno mismo ni de aceptar por los demás".

También ha deseado "suerte" al rector de la UIMP en la "nueva andadura" que comienza la UIMP en sus manos y le ha pedido que es "imprescindible" que la institución "siga avanzando" en el proceso de integración de su actividad académica en la ciudad.

MEMORIA

El acto de inauguración ha comenzado con la exposición a cargo de la secretaria general de la UIMP, Miryam de la Concepción González, quien ha realizado un breve repaso por la memoria de la institución académica el pasado curso 2012/2013, en el que se desarrollaron 42 programas formativos (18 máster, 7 doctorados y 12 títulos propios) en los que participaron 1.409 alumnos.

En cuanto a esta edición de los cursos de verano de La Magdalena, ha señalado que se celebrarán un total 132 sobre temas actuales, científicos o culturales, entre otros muchos.

Los efectos del cambio climático,

Como una "ruleta rusa"

La intervención más extensa ha sido la del Nobel galardonado, que, durante casi una hora, ha defendido que el coste económico de "cambiar la ruleta" para frenar el cambio climático es "muy moderado" —aproximadamente un 1, 2 o, "como mucho", un 3% del Producto Interior Bruto (PIB)internacional— y, "mucho menor" que lo es soportar los "efectos" que causa y puede tener en el futuro.

Aunque ha estimado que el incremento de temperatura por el cambio climático puede estar entre los 2 y 4 grados centígrados ha señalado que hay probabilidad, aunque que ésta no supera el 30 por ciento, de que la subida llegue a ser de 5 o 6 grados. "Es como jugar a la ruleta rusa", ha dicho este Nobel mexicano.

Ha señalado que un incremento de esa temperatura supondrían "cambios gigantescos e irreversibles" en el planeta y asumir el riesgo es "inaceptable".

Al igual que ya adelantó en una rueda de prensa anterior al acto, Molina ha hablado de la necesidad de un acuerdo internacional contra el cambio climático para limitar las emisiones que lo provocan, algo que no llegará hasta que EE.UU. lo ratifique, algo que, a su juicio, no está en condiciones por la mayoría republicana en el Senado, lo que supone la generación de un "cuello de botella" que espera que cambie "a la brevedad".

Sin embargo, Molina ha pedido "racionalidad" en la toma de decisiones políticas sobre el cambio climático y se ha mostrado "optimista" pues cree que la "rentabilidad es lo que va a triunfar".

Al acto, han acudido entre otros el consejero de Educación, Cultura y Deporte, Miguel Ángel Serna; el delegado del Gobierno en Cantabria, Samuel Ruiz; el presidente del Parlamento regional, José Antonio Cagigas; diputados y concejales del Ayuntamiento de Santander y de otros consistorios; el rector de la Universidad de Cantabria, José Carlos Gómez Sal, y otras autoridades civiles y militares.