Medio Ambiente atiende con el "máximo interés" la revisión del parámetro de inmisiones de CS2 pedida por Sniace

Mejorar la calidad del aire es "uno de los grandes retos" del MAGRAMA, según el secretario de Estado de Medio Ambiente
Inauguración de la jornada en la UIMP
Inauguración de la jornada en la UIMP
EUROPA PRESS
Inauguración de la jornada en la UIMP

El secretario de Estado de Medio Ambiente, Federico Ramos, ha asegurado este martes, en Santander, que el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (MAGRAMA) está atendiendo con el "máximo interés" las petición recibida por parte de la empresa Sniace para revisar el parámetro de inmisiones de disulfuro de carbono (CS2).

Así lo ha manifestado Ramos, en declaraciones de la prensa, antes de inaugurar la jornada 'Nuevas medidas para la mejora de la calidad del aire y la protección de la atmósfera' en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP).

Ramos ha indicado que, a parte de la "situación empresarial" de Sniace, que tiene interpuesta una querella por las inmisiones de la planta cántabra Viscocel, el MAGRAMA también está revisando ese parámetro con "el efecto" de adaptarse a la normativa de la Unión Europea (UE).

Y es que, según ha explicado, Sniace también ha reclamado al MAGRAMA la adaptación de la normativa española de estas inmisiones a la europea, algo que "está en estudio", ha afirmado Ramos, que ha añadido que el Gobierno español tiene "conciencia" de la necesidad de esa adaptación.

"uno de los grandes retos"

Estas inmisiones son unos de los contaminantes del aire, tema que el secretario de Estado de Medio Ambiente ha abordado en la inauguración de la jornada, en la que ha destacado que aumentar la calidad del aire es "uno de los grandes retos" del Gobierno tanto por su "influencia" en la calidad de vida y en la salud de los ciudadanos, sobre todo del entorno urbano.

Por ello, una de las acciones "fundamentales" en política ambiental es la reducción de los contaminantes del aire, en lo que se está haciendo "un especial esfuerzo" porque, aunque en España la calidad del aire es "razonable" en comparación con países similares, "hay que seguir avanzando", ha apostillado Ramos.

Plan aire

El Gobierno sabe que en la calidad del aire "no es fácil hacer cosas con efecto inmediato, a corto plazo" y por ello ha puesto en marcha el Plan Nacional de Calidad del Aire 2013-2016 (Plan Aire), en el que se engloban 78 medidas no sólo informativas y de concienciación, sino también dirigidas a la administración.

Sobre este último, Ramos ha considerado que en España "aún queda mucho campo por explorar en materia de la fiscalidad verde", en el marco de la que "hay cosas que hacer" como que "los impuestos clásicos se reorienten" de forma que, según ha indicado, aunque conserven su fin recaudador, ahonden en "conservar" el Medio Ambiente.

Y es que restaurar el medio natural es "muy caro", ha ensalzado el secretario de Estado, que ha opinado que la reorientación de estos hacia una "fiscalidad de sostenibilidad" permitiría avanzar en esta materia. También ha añadido que el impuesto de circulación de los vehículos debería reorientarse hacia "parámetros de calidad del aire" y ha apoyado la premisa de que "quien contamina, paga".

Ramos ha manifestado que el Plan Aire es "equilibrado" y busca ser "realista y ambicioso" porque el Medio Ambiente necesita de la "sensibilidad suficiente" a la hora de marcar objetivos en los que haya un "equilibrio sostenible".

En este sentido, ha señalado que la relación que existe entre la calidad del aire y los contaminantes atmosféricos "es cada vez más clara" y "evidente" al igual que "las personas somos lo que comemos".

Pima aire y sol

En la misma línea que el Plan Aire, el Ejecutivo nacional ha puesto en marcha los planes de impulso al medio ambiente (PIMA) Aire y Sol. En el marco del primero, se conceden ayudas para la renovación de vehículos comerciales como furgonetas y pequeños camiones, que son lo que "más contaminan" con la emisión de partículas y dióxido de nitrógeno.

Más de 5.000 vehículos se han renovado ya a través de este plan, según ha avanzado Ramos, que ha detallado que este PIMA se financia con el dinero obtenido de las subastas de emisiones de dióxido de carbono (CO2) y en su primera convocatoria se ha dotado con 38 millones de euros.

Por su parte, el PIMA Sol, aprobado el pasado viernes por el Consejo de Ministros y dotado con 405 millones de euros, está dirigido a los establecimientos hoteleros y busca que estas empresas reduzcan sus emisiones de CO2 y otros contaminantes, y para ello el Gobierno les comprará la reducción de esas emisiones que acrediten.

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