El nuevo secretario de Defensa estadounidense, Robert Gates, llegó hoy a Bagdad en un viaje sorpresa tan sólo dos días después de asumir su cargo.

Nueva estrategia iraquí

Gates tiene el mandato del presidente estadounidense, George W. Bush, de elaborar una nueva estrategia de guerra para Irak.

"El propósito es salir, escuchar a los comandantes, hablar con los iraquíes y ver lo qué puedo aprender", señaló Gates ayer antes de partir hacia Irak.

Gates y el general Peter Pace, jefe del Estado Mayor, tienen previsto reunirse con los altos cargos militares estadounidenses e iraquíes así como con responsables políticos del país.

Una calamidad

Ayer, Bush había indicado al 'Washington Post' que está dispuesto a aumentar el número total de soldados con que cuentan el Ejército estadounidense, admitiendo que está de acuerdo con las recientes quejas de los generales de que las fuerzas no son lo suficientemente numerosas para hacer frente a la campaña mundial contra el terrorismo.

Gates juró su cargo el lunes prometiendo visitar Irak "bastante pronto" para escuchar de primera mano a los responsables militares.

"El fracaso en Irak en esta situación sería una calamidad que afectaría a nuestro país, perjudicaría nuestra credibilidad y pondría en peligro a los americanos en las próximas décadas", aseveró.