Este porcentaje es un 4,5% superior al del trimestre anterior (era de un 56,9%) y se ha disparado un 17,92% en un año. Los expertos estiman que seguirá incrementándose. El coste de acceso a la vivienda es mucho más complicado para las mujeres jóvenes. Ellas tienen que dedicar un 69,1% de su salario, mientras que un chico que quiera vivir solo dedica a la hipoteca el 56,6% de sus ingresos.

La principal razón que explica esta diferencia se encuentra en los salarios. Un hombre joven cobra, de media, unos 3.000 euros más al año que una mujer (16.402,55 frente a 13.437,91). A esto se une el alto índice de paro en el mundo laboral femenino (superior al 10%, frente al 5% de los hombres) y las malas condiciones de los empleos.

Con estos ingresos, una joven aragonesa puede aspirar como mucho a un piso de no más de 43,4 metros cuadrados. Ellos tienen un mayor poder adquisitivo y pueden comprarse una vivienda de 53 metros cuadrados. Si el hogar se comparte, una pareja joven podría aspirar a un piso de 80,6 metros cuadrados.

En España crece la emancipación

El número de jóvenes emancipados en España aumentó en el primer semestre del año un 6,22% con respecto al mismo periodo del año pasado. Ya son 289.000 personas de 18 a 34 años, un 28% de ellos inmigrantes. Los españoles dedican de media el 64,3% de su salario a la compra de la vivienda libre. Para este sábado hay convocadas manifestaciones por una vivienda digna.

Las claves

Zaragoza, la más cara: Los jóvenes de la provincia de Zaragoza son los peor parados. Dedican el 66,1% de su sueldo a los pagos del piso cuando lo compran solos. El 40% si lo hacen en pareja.

Los bancos aconsejan el 30%: Los bancos aconsejan que al pago de la hipoteca no se dedique más del 30% o 40% de los ingresos del hogar. Por eso, muchos jóvenes tienen dificultades para pedir hipotecas.