El sindicato USOCV Autónomos del Taxi y la Asociación de Taxistas de la Comunitat Valenciana (ATCV) han convocado al colectivo a manifestarse, el próximo 17 de junio a partir de las 16.30 horas, frente al Palau de la Generalitat para reclamar "la implantación inmediata de una regulación horaria que fije una prestación de servicio máxima de 12 horas para todas las autorizaciones de Área de Prestación Conjunta de Valencia". Asimismo, animan a pernoctar ante la sede oficial hasta que el presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, reciba a una representación de estos profesionales.

Debido a la gran afluencia de taxis prevista por los convocantes —alrededor de 2.500, concretan los convocantes—, la manifestación partirá desde cuatro puntos diferentes "a fin de poder facilitar a todos la asistencia a la misma, y confluirán las cuatro partes en las Torres de Serrano, donde se estacionarán los taxis, para concentrarse en la plaza dels Furs, y desde ahí, dirigirse a pie al Palau de la Generalitat, arropando a los compañeros que pasaran la primera noche al raso", explican lo organizadores de la protesta en un comunicado.

Los colectivos recalcan que han "solicitado todos los carriles de circulación para poder realizar el recorrido a paso humano, así como permisos para estacionar los taxis en tres y cuatro carriles de las calles Pintor López, Conde de Trenor, Blanquerías, todo Guillem de Castro, y en el otro margen del rio, en Llano de Zaidia, Guadalaviar, Cronista Ribelles, Pío V".

Una vez hayan llegado los cuatro 'brazos' de la manifestación y, tras aparcar los taxis, tienen previsto continuar a pie hasta el Palau de la Generalitat, lugar en el que pernoctarán algunos compañeros, que serán relevados por otros a las ocho y media de la mañana del martes "y así sucesivamente hasta que el molt honorable president les reciba", advierten.

Todos los compañeros pasarán la noche en su jornada de fiesta, a fin de poder tener compañeros suficientes en caso de que las pernoctaciones se alarguen en el tiempo. "Estamos preparados y convencidos de nuestras razones, somos 2.500 taxistas dispuestos a relevarnos y dormir al raso", subrayan.

Además, el secretario general de USOCV, Ismael Montero, cursó la oportuna petición de cita con el 'president' Alberto Fabra, el pasado jueves 6 de junio, por lo que las entidades están "a la espera de respuesta".

En la misma línea, justifican la convocatoria de la movilización "ante la falta de respuesta de la Conselleria de Infraestructuras y Transportes, después de la anterior manifestación del día 22 de Mayo y la entrega de las 1.500 firmas de los taxistas, pasadas por registro, pidiendo la implantación inmediata de una regulación horaria que fije una prestación de servicio máxima de 12 horas para todas las autorizaciones de APCV".

"Estas firmas y esta misma petición será entregada en el registro de la presidencia y al propio president de la Generalitat en persona cuando nos reciba.

"cumplir su palabra"

"No entendemos —prosiguen— la negativa de la consellera Isabel Bonig, a cumplir su palabra dada en el pleno de las cortes valencianas de implantar la regulación que la mayoría de los taxistas eligiésemos".

Las 1.500 firmas recogidas "suponen más del 60 por ciento de los titulares de autorizaciones de APCV". "Y la situación de irregularidades que sufre el sector es insostenible con jornadas que van entre las 15 y 20 horas diarias para los autónomos y jornadas semanales para los asalariados de 60 horas, cuando en muchos casos se cotiza por ellos escasas 20 horas semanales, sin derecho a pagas extra, ni vacaciones, y obligándoles a firmar el finiquito nada más acceder al puesto de trabajo, como tantas veces ha denunciado este sindicato", reprochan.

"La conselleria en una actuación totalmente incomprensible ha eliminado el archivo de conductores asalariados que la propia Ley de movilidad le obligó a crear, y que la extinta Agencia valenciana de movilidad estaba gestionando, por lo que cuando se cursa una denuncia por exceso de jornada en el ministerio de trabajo, a este le es imposible poder controlar los horaria y jornadas de los asalariados, sumiendo a nuestro sector en un nido de ilegalidades, corruptelas y fraudes, que acaban afectando no solo a los propios trabajadores (autónomos y asalariados) del sector, si no a todos nuestros usuarios y ciudadanos en general", concluyen.