El juez de Primera Instancia e Instrucción 2 de Melilla ha solicitado la colaboración ciudadana para identificar a las madres biológicas en los 16 posibles casos de personas víctimas de "niños robados" en la llamada 'Operación Oculta' realizada por la Guardia Civil bajo la supervisión de este juzgado, hechos ocurridos en las décadas de los 70 y 80.

En declaraciones a los periodistas, el decano de los jueces en Melilla, Emilio Lamo de Espinosa, ha hecho un llamamiento para precisar la colaboración ciudadana y de los medios de comunicación para que difundan, "con toda la intensidad posible", la noticia de la búsqueda de las madres biológicas a fin de que estas, ya se encuentren en Marruecos o donde fuera, se puedan poner en contacto con el Juzgado Primera Instancia e Instrucción 2 de Melilla o con la Guardia Civil.

El decano ha subrayado que en la instrucción llevada a cabo hasta el momento "se han detectado 16 posibles casos de personas víctimas de estos hechos —no se descarta que puedan ser identificadas otras, cuyo número se desconoce—, habiéndose identificado hasta 31 personas presuntamente implicadas, de las que dieciséis han fallecido".

Emilio Lamo de Espinosa ha reconocido que "pese a todos los esfuerzos invertidos durante este tiempo, no se ha logrado identificar a las madres biológicas, siendo ésta la pieza del puzle que queda por colocar".

Lamo de Espinosa ha detallado que cualquier madre biológica o cualquier persona que desee ponerse en contacto con los investigadores para exponer su situación, puede hacerlo al siguiente número de teléfono 0034952696033, extensión 221. El juez ha facilitado el número completo, con prefijo incluido, para llamadas desde Marruecos.

El decano ha apuntado que los resultados esenciales de la investigación, hasta ahora, han sido que el inicio de las pesquisas tienen su origen en una denuncia que presentó la asociación Anadir (Asociación Nacional de Afectados por las Adopciones Irregulares), ante la Fiscalía General del Estado, el 27 de enero de 2011.

Asimismo, ha añadido que en el caso de Melilla, tal denuncia, junto a la documentación que se acompañaba, fue recibida por la Fiscalía Provincial de Málaga —Fiscalía de Área de Melilla—, acordándose la incoación de las diligencias de investigación penal 1/11, mediante decreto de la Fiscal Jefe de Área, fechado el 21 de febrero de 2011.

De igual modo ha manifestado que a la denuncia presentada por Anadir, se acumularon dos posteriores, interpuestas por M.S.T. y M.C.R, víctimas de los hechos investigados, al haber sido las mismas presuntamente adquiridas a cambio de precio.

El decano ha precisado igualmente que la Fiscalía de Melilla, tras recibir las declaraciones indicadas, elevó lo actuado al Decanato de Melilla, quien lo remitió al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Melilla, al corresponderle por turno de reparto.

Por otro lado, ha explicado que el 10 noviembre de 2011, se incoaron las correspondientes Diligencias Previas 1238/11, que se instruyen por la presunta comisión de los delitos de detención ilegal, falsedad documental, alteración de la paternidad y suposición de parto.

Para la práctica de las diligencias de investigación, ha indicado que se ofició al Grupo de Personas correspondiente a la Unidad Orgánica de la Policía Judicial perteneciente a la Comandancia de la Guardia Civil de Melilla, quienes han identificado plenamente a las personas presuntamente relacionadas con los hechos investigados (víctimas, personas implicadas, comadronas implicadas y personas relacionadas ya fallecidas).

Por otra parte, ha reconocido que el procedimiento se encuentra actualmente en fase de instrucción, si bien la misma se halla prácticamente finalizada.

"Los resultados obtenidos hasta el momento durante esta investigación son fruto de la actuación conjunta de diversos protagonistas. En primer lugar, de la colaboración ciudadana, integrada por las personas que, ya sea constituidos en asociación o individualmente, se han puesto en contacto con los investigadores para contar su historia y traerla al proceso", ha declarado el magistrado.

Asimismo, ha destacado el papel de los medios de comunicación de toda clase, que "a través de la difusión de la noticia y su colaboración con los investigadores han facilitado datos sin los cuales la instrucción se habría ralentizado, haciendo muy difícil su continuación". Finalmente, de la intensa labor de investigación desplegada por la Guardia Civil.

"Gracias a la labor y profesionalidad de estos tres agentes —del Grupo de Personas— se ha logrado identificar a personas afectadas por estos hechos, dando un impulso fundamental a la instrucción" ha precisado.

Por último, ha admitido que el trabajo desarrollado tanto por el Juzgado de Instrucción número 2 como por los investigadores del Grupo de Personas correspondiente a la Guardia Civil de Melilla, ha estado siempre dirigido a descubrir la verdad de lo sucedido, hasta sus últimas consecuencias.

No obstante a lo anterior, para alcanzar el objetivo final de la investigación, que no es otro que hacer Justicia, "es imprescindible llegar a identificar a las madres biológicas de las víctimas. Conformarse con los resultados obtenidos hasta el momento, no empleando todos los recursos a nuestro alcance para identificar a las madres biológicas, sería una irresponsabilidad por parte de la instrucción", ha apuntado.

En este sentido Emilio Lamo de Espinosa ha reiterado "el llamamiento de colaboración para llegar a la verdad a la que estamos obligados como servidores públicos".