El Ayuntamiento de Palma intermedia con Caja Rural y evita que 16 familias sean desahuciadas en Son Gotleu

Las negociaciones que ha mantenido el Ayuntamiento de Palma con Cajamar Caixa Rural han logrado evitar que 16 familias sean desahuciadas de sus viviendas en la calle Tomás Rullán, del barrio de Son Gotleu, una medida que esta previsto aplicar este miércoles, 5 de junio.

Las negociaciones que ha mantenido el Ayuntamiento de Palma con Cajamar Caixa Rural han logrado evitar que 16 familias sean desahuciadas de sus viviendas en la calle Tomás Rullán, del barrio de Son Gotleu, una medida que esta previsto aplicar este miércoles, 5 de junio.

Precisamente, en el Pleno municipal del pasado jueves, el consistorio llegó a un acuerdo para que Palma sea declarada libre de desahucios, aunque tenía pendiente los que estaban previstos para las 16 familias, que finalmente se han logrado evitar gracias a la intermediación del Ayuntamiento.

"El tema de los desahucios es un compromiso del equipo municipal, lo que ha llevado a que se aprobara por unanimidad un acuerdo para hacer frente a esta lacra social y a esta situación desgraciada que padecen algunas familias", ha remarcado en rueda de prensa el teniente de alcalde de Urbanismo y Vivienda, Jesús Valls, que ha comparecido junto a la regidora de Bienestar Social, Ana Ferriol.

Por su parte, el director territorial de Baleares de la entidad financiera Caja Rural, Jaume Julià, ha confirmado la notificación de la suspensión de los desahucios y ha explicado que, a partir de este momento, se pondrán a estudiar "caso por caso" para intentar buscar soluciones.

Valls ha apuntado que algunas de las posibles soluciones podrían pasar por la obtención de una hipoteca, la posibilidad de acogerse a un alquiler social o, en el último "extremo", sino pueden quedarse en las viviendas, serán atendidos por los servicios sociales del Ayuntamiento.

La regidora de Bienestar Social ha señalado que "lo más destacable" ha sido el hecho de que la entidad bancaria haya comunicado la suspensión de los desahucios de esas familias, un gesto que ha agradecido a Caja Rural.

Por su parte, Julià ha indicado que las familias se han visto afectadas de "manera colateral" ya que, tal y como ha explicado, es el promotor el que ha entrado en concurso al no pagar la deuda que tiene con Caja Rural, por lo que la ejecución vía concurso se realiza para reclamar el préstamo al promotor.

"Lo primero que hemos realizado esta mañana ha sido paralizar el alzamiento ordenado por el juzgado para que las familias puedan estar tranquilas y, a partir de aquí, poder trabajar para dar una solución a esta gente", ha agregado.

"Es una situación que no nos agrada, pero que la intentaremos abordar de la mejor manera posible y menos dolorosa para las familias", ha apostillado el director de la entidad.

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