La Audiencia de Málaga ha condenado a un hombre de 53 años a una pena de cuatro años de cárcel como responsable de un delito contra la salud pública por ser el encargado de preparar el transporte de 891 kilos de hachís desde Marruecos hasta las costas españolas. Además, la Sala le impone la una multa de cuatro millones de euros.

El relato de los hechos probados refleja que, como resultado de las investigaciones realizadas a partir de mayo de 2006, se tuvo conocimiento de la actividad desarrollada por un grupo de personas, ente ellas, el acusado, relacionada con el transporte de una importante cantidad de hachís desde Marruecos a España.

Las primeras pesquisas, que se iniciaron a raíz de varias intervenciones telefónicas, otorgaron a los agentes información a cerca de un alijo que el procesado quería introducir en la península. La investigación llevó a los agentes a solicitar al juzgado nuevas escuchas telefónicas de personas presuntamente implicadas en el alijo de hachís.

A consecuencia de esas intervenciones de teléfonos, los agentes tuvieron conocimiento de que el desembarco de la droga se produciría en la madrugada del día 28 de abril de 2007, estableciéndose un dispositivo policial para interceptar la entrada de la droga.

Sobre las 05.00 horas de la mañana, los efectivos policiales observaron como un vehículo se acercaba a la Playa de La Araña, en la capital malagueña, con dos personas en su interior. Una vez allí, uno de los ocupantes se introdujo en una lancha de color blanco y comenzó a navegar mar adentro, según refleja el relato de los hechos.

Al mismo tiempo el otro ocupante del vehículo se dirigió hacia una furgoneta que estaba aparcada cerca de la playa, y dando una serie de rodeos volvió a la zona. Acto seguido, el hombre que se introdujo en la embarcación comenzó a hacer señales visuales a otro navío. Tras esto, ambas embarcaciones se acercaron y la segunda comenzó a descargar la droga en la lancha que había salido de la playa de La Araña.

El primer navío se separó e inició su regreso a la playa, situada tras el puerto deportivo de El Candado, momento en el cual, varios individuos se acercan a la lancha para proceder al desembarco de la droga. En ese instante intervinieron los agentes que detuvieron a dos de los implicados en la operación de desembarco, lográndose escapar las otras dos personas.

La sustancia intervenida resultó ser 'polen de hachís', y una vez pesada, arrojó un resultado de 891 kilogramos, con una pureza media de THC del 15 por ciento y un valor en el mercado de más de dos millones y medio de euros.

La Sala considera probado, gracias a las intervenciones, que antes de la operación el procesado tuvo varias reuniones en las que se preparó el transporte y desembarco de la droga. El Tribunal señala que el propietario de la droga es el acusado pues "habría organizado, coordinador y financiado la operación", habiendo abandonado España horas antes a la operación.

Así, al ser el responsable del desembarco de la droga, la Audiencia de Málaga condena al acusado a una pena de cuatro años de prisión y multa de cuatro millones de euros, tras haber considerado la aplicación de la atenuante por dilaciones indebidas solicitada por la defensa del acusado, es decir, por un retraso a la hora de juzgar el caso.