El grupo socialista del Ayuntamiento de Castellón atribuye el traslado de la convención política del PP a Peñíscola a que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha "sentenciado" al alcalde de la capital de La Plana, Alfonso Bataller, "al no querer a un imputado a su lado".

Así, los socialistas recuerdan que el PP ha decidido trasladar a Peñíscola la convención que se había anunciado en Castellón para los días 7 y 8 de junio, a la que está previsto que asista el presidente del Gobierno, "justo después de la declaración de Alfonso Bataller en el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana, prevista para el 6 de junio", ha señalado en un comunicado el portavoz del grupo socialista, Pep Grau.

Según Grau, Rajoy "ha sentenciado a Bataller al no querer relacionarse con un imputado, otro más, en la trama Gürtel", lo que —según ha dicho— es "una muestra más de que el alcalde de Castellón tiene los días contados en la política de Castellón", porque "si el líder del PP no quiere políticos bajo sospecha a su lado, los ciudadanos de Castellón tampoco los queremos".

En su opinión, la declaración judicial de Bataller "puede acabar siendo su último acto como alcalde", y ha recordado que el alcalde "ha expresado, una y otra vez, que cuando comparezca ante el juez aclarará las imputaciones que se le han hecho por su presunta participación en la trama corrupta que ha saqueado las instituciones de la Comunitat Valenciana". Al respecto, Grau se pregunta "qué pasará si el juez le mantiene la imputación".

El portavoz socialista ha destacado que Bataller fue imputado el 25 de abril por un presunto delito de prevaricación "al haber adjudicado contratos a dedo en 2007 a las empresas Orange Market, Servimadrid y Diseño Asimétrico para la organización de la entrega de los Premios Salud y Sociedad". En ese periodo, -ha añadido- "Bataller ocupaba la Subsecretaría de la Conselleria de Sanidad y, según la investigación policial, firmó las adjudicaciones de los contratos al margen de la ley".

"Rajoy huye de los imputados, por eso no quiere pisar la Comunitat Valenciana, para no tener que compartir fotografía con dirigentes sospechosos de corrupción", ha apuntado Grau.

El socialista ha resaltado que la última visita del presidente nacional del PP a Castellón fue en 2008, en la precampaña de las elecciones europeas, "cuando salió en defensa de entonces líder provincial del PP, Carlos Fabra, al que calificó de 'ciudadano ejemplar'", y ha recordado que, en estos momentos, Carlos Fabra "está procesado por tráfico de influencias, cohecho y fraude fiscal, y a punto de sentarse en el banquillo".