Los que todavía tengan un viejo celular en algún cajón de casa deben saber que con el reciclaje se recuperan el 90% de los materiales que componen uno de estos teléfonos.

«Conseguimos vidrio, cobre, plásticos..., que sirven para evitar que vayan a parar al entorno y también para ahorrar materias primas», explican los responsables de Tragamóvil. Pero no sólo es una responsabilidad medioambiental. Desde el pasado mes de agosto, un decreto obliga a los españoles a la recogida selectiva de este tipo de aparatos y prohíbe desecharlos en cualquier parte. Este tipo de reciclaje triunfa cada vez más entre los gallegos, que se sitúan al mismo nivel que el resto de las comunidades.

Todos los teléfonos que se recogen van a parar a una de las dos plantas especiales para este tipo de residuos: una, en el País Vasco y otra, en Andalucía. Para informar de todo el proceso y de las ventajas de esta iniciativa, la Fundación Tragamóvil recorre durante este mes las principales ciudades gallegas para que los usuarios sepan dónde pueden dejar su viejo teléfono, para qué servirá... Ayer estuvieron en A Coruña y visitarán Vigo el domingo. Para conocer todos los puntos de recogida: www.tragamovil.com

Ya superan a la población

No falta nada para Navidad y uno de los regalos estrella será el móvil, en sus versiones más modernas. Y Galicia también se deja arrastrar por esa pasión por la tecnología. Los expertos calculan que los gallegos cambian de celular como máximo cada dos años (al igual que en el resto de España). «Ya hay el doble de móviles que personas, porque muchos tienen el propio, el del trabajo... Hasta los niños más pequeños los usan. Es una moda que cada vez va a más», aseguran.