La Diputación de Pontevedra recibirá parte de la herencia de dos pontevedreses fallecidos, según ha adelantado este viernes en rueda de prensa el presidente de la institución, Rafael Louzán.

Estos benefactores nombraron a la Diputación junto con el Museo de Pontevedra, como beneficiarios de una serie de inmuebles, obras de arte o "cuantías económicas importantes".

Los servicios jurídicos del organismo provincial están elaborando sus informes para determinar el estado de los bienes legados, "porque aparentemente ese dinero está sujeto a productos híbridos", dijo Rafael Louzán.

Por lo menos una parte del dinero legado, al menos en una de estas herencias, está atrapado en preferentes y participaciones subordinadas. Por este motivo Louzán se ha mostrado cauteloso y no ha querido detallar el contenido exacto de los bienes cedidos.

"Estamos elaborando un informe y pedimos información al registro y al banco", ha explicado Louzán insistiendo en que los testamentos son "farragosos" por todas esas cuestiones y se conocerán en su integridad en los próximos días.

La Deputación y el Museo serán beneficiarios, en cuanto se reciba la herencia, de "inmuebles, dinero, pisos y algunas obras de arte", destacando la existencia de "vajillas de certo valor". Compartirán estas herencias "con la parte de la familia que existe" de ambos pontevedreses, entre los que ha citado a sus sobrinos. Una de estas herencias tiene un montante global de 3,5 millones de euros, a repartir entre sus familiares y la Diputación.

El presidente de la Deputación ha querido además "resaltar y agradecer" que personas "de forma altruista" piensen en el organismo provincial como destinatario de sus bienes y de sus inmuebles. Siguen el ejemplo, dicen, de "muchos ciudadanos que en el pasado, en el presente y seguro que en el futuro legan a la Diputación y al Museo, y por lo tanto a todos los pontevedreses, una parte importante de sus bienes".