Una veintena de oficinas comerciales de las comunidades autónomas se han integrado ya con las del Estado, y hay otras 60 pendientes de culminar el proceso, según ha explicado este miércoles el secretario de Estado de Comercio, Jaime García-Legaz, ante la Comisión de Economía del Congreso, donde ha subrayado la importancia de este plan de integración, al que se han adherido todas las regiones con delegaciones exteriores salvo Cataluña y el País Vasco.

García-Legaz ha subrayado las medidas de mejora de la efectividad de los instrumentos de comercio exterior con los que cuenta el Gobierno, destacando que se intenta aumentar la integración y coordinación de los diferentes organismos, incluida la red de oficinas comerciales autonómicas que, al inicio de la legislatura, era "más extensa que la propia red del Estado" y además adolecía de falta de planificación y coordinación.

Así, se daba la circunstancia de que los empresarios podían llegar a encontrar hasta diez oficinas diferentes en una misma ciudad, lo que daba "imagen de despilfarro y descoordinación" y "no trasladaba la mejor imagen de España en una época de crisis como ésta". Por eso, el Gobierno propuso a las comunidades autónomas un plan de integración de las oficinas autonómicas en dependencias de las oficinas comerciales del Estado manteniendo no obstante su independencia administrativa y funcional.

Satisfacción con el plan

"Estoy muy satisfecho", ha afirmado el secretario de Estado, apuntando que ya se ha comprometido la integración de 84 oficinas, 21 de las cuales ya están físicamente incorporadas a las delegaciones estatales. En concreto, Andalucía ha integrado sus delegaciones en Londres, México D.F. y Tokio; Castilla y León, las de Bruselas, Berlín, Londres, Sao Paulo y Düsseldorf; Canarias, la de Washington; Cantabria, la del D.F.; Extremadura, la de Casablanca; Galicia, las de Berlín, Shanghai y Moscú; y la Comunidad Valenciana las de Casablanca, Düsseldorf, Hong Kong, Londres, Moscú, Nueva Delhi y Sao Paulo.

En concreto, las regiones que "han acelerado" su incorporación al plan son la valenciana y la castellano-leonesa, mientras que las únicas comunidades con delegaciones exteriores que no se han adherido al plan son Cataluña y País Vasco, que suman "una tercera parte de las oficinas autonómicas en el exterior"; mientras que la docena restante (todas, salvo Asturias, Aragón y Navarra) sí se han incorporado.

Según el secretario de Estado, en todos los casos donde las oficinas ya se han integrado se ha constatado una amplia satisfacción de los usuarios, que pueden acceder así a más servicios y a una información más completa. Además, junto al ahorro logístico y de personal también se producen sinergias de funcionamiento que son positivas para todas las partes.

"Nuestra previsión es que en los próximos meses las comunidades autónomas continúen cumpliendo con los convenios de adhesión al plan e integren un número importante de oficinas", ha añadido García-Legaz.

Por otra parte, la intención del Gobierno también es que las comunidades autónomas participen en las iniciativas de comercio exterior del Ministerio de Economía. Por ello, seis de las regiones que más exportan forman parte del consejo de administración del ICEX y además todas reciben el Plan de Actividades anual para que "puedan programar coordinadamente sus acciones".

Integración de invest in spain

En el mismo marco de mejora de la efectividad de los instrumentos de internacionalización, se persigue una mayor colaboración entre la Compañía Española de Seguros de Crédito a la Exportación (CESCE), la Compañía Española de Financiación del Desarrollo (COFIDES), de España Expansión Exterior y del ICEX.

En este sentido, se evalúan qué actuaciones presta más de una entidad, se analiza que las medidas beneficien realmente a las empresas, y se trabaja para la creación de una ventanilla única de internacionalización, con la consecuencia reducción de trabas burocráticas.

Como ejemplo, García-Legaz ha citado la integración de 'Invest in Spain' en el ICEX, que "ha supuesto una reducción del gasto corriente de casi 1,17 millones de euros anuales", que a lo largo de la legislatura supondrá un ahorro de 3,5 millones.

La Secretaría de Comercio también está prestando especial atención a "una de las principales debilidades" del sector exterior español: la falta de financiación. Para ello, está fortaleciendo instrumentos como el FIEM, cuya ejecución presupuestaria ha pasado del 18% de 2011 a casi un 95% el año pasado; se han puesto en marcha sendas líneas ICO para internacionalización y para exportadores; se ha mejorado la oferta de seguros de crédito a la exportación; y se estudia tocar la normativa de visados para facilitar la llegada de inversores, que ya ven más atractiva España por las reformas del Gobierno.

Asimismo, se está haciendo un "esfuerzo muy importante" en el apoyo a las pymes con varios programas específicos "para salir y para apoyar en destino", y se ha reforzado el FIEX y FONPYME.

Buenos resultados

Con esta estrategia, el sector exterior está superando los desequilibrios existentes, cuya principal manifestación es el déficit exterior, que obligaba a España a financiarse en grandes cantidades y revelaba las carencias de competitividad de nuestra economía. Sin embargo, este mes de marzo se ha conseguido por primera vez superávit de la balanza por cuenta corriente y también ha mejorado la balanza comercial, por lo que "este indicador económico está hoy en día prácticamente superado".

Con respecto al papel que la debilidad del consumo interno tiene en esta corrección, García-Legaz ha reconocido que hay una relación pero cree que no se puede concluir que se debe exclusivamente a ese factor. "Una parte se debe a la capacidad de sustituir producción importada por nacional, y es una buena noticia", ha dicho, avanzando que la Secretaría de Estado de Economía realizará un estudio para cuantificar el peso de cada factor.

A juicio del responsable gubernamental, esto supone un "cambio trascendental" porque el vuelco en la balanza por cuenta corriente es "una señal de solvencia fundamental" y constituye un "indicador adelantado de la próxima recuperación", que los organismos internacionales prevén a partir de 2014.

Según García-Legaz, esto se ha conseguido fundamentalmente gracias a la mayor competitividad de las empresas españolas, al aumento de las empresas internacionalizadas, que entre enero y febrero rozaban las 59.000 compañías, un 8,8% más que en el mismo periodo del año pasado y con una "tendencia en aumento"; a la diversificación de los mercados de destino, que está permitiendo superar el exceso de concentración en algunos mercados como el europeo; y también a que el sector exportador se está "centrando en bienes de alto valor añadido".

"Vamos sustancialmente mejor que Alemania, Italia o Francia en términos de crecimiento, pero todavía estamos lejos de donde aspiramos a estar. Vamos bien pero queremos ir mejor", ha añadido, precisando que la actividad exportadora debe ser "permanente, y no coyuntural por la crisis".

Una tendencia fundamental ante las previsiones de la Organización Mundial del Comercio (OMC) de que en los próximos años los principales ejes de comercio viren hacia los países en desarrollo, con mejores perspectivas económicas, por lo que es necesario adaptarse a esa nueva geografía de los intercambios comerciales.

En este sentido, García-Legaz ha indicado que la estrategia del Gobierno es destinar el 65% del presupuesto del ICEX a mercados extracomunitarios, así como seguir impulsando acuerdos de libre comercio con diferentes países, con Estados Unidos como "prioridad". Finalmente, también juegan un papel importante los planes integrales de mercado, a los que se dará un impulso con la búsqueda de nuevos países-oportunidad sin perder de vista a los mercados estratégicos más importantes para España.