Bahía de Cochinos, un lugar en la historia, un lugar para bucear

La Bahía de Cochinos, de gran simbolismo histórico para los cubanos, es ahora una zona de desarrollo turístico que combina la atracción por los escenarios de la revolución castrista con un valioso paisaje submarino.

Carteles y un museo en Playa Girón recuerdan en esta amplia bahía, a 149 kilómetros al sudeste de La Habana, la incursión fallida en 1961 de mercenarios enviados por Estados Unidos a la isla, en la que dos años antes Fidel Castro había tomado el poder. El triunfo de la revolución de corte socialista en Cuba inquietaba en Estados Unidos, a solo 90 millas náuticas de la isla caribeña, explican aquí a los visitantes extranjeros.

En el museo de Playa Girón, dos tanques y una avioneta a ambos lados de la entrada reciben a los turistas. En el interior, se exhiben fotografías y discursos de retórica revolucionaria que rememoran la batalla del 17 de abril de 1961, que apenas duró 66 horas.

Un vídeo y varios mapas ilustran también las fases del Plan Pluto que finalizó con un intercambio de prisioneros en poder de Cuba a cambio de alimentos y medicinas que necesitaba la isla. El episodio bélico de hace medio siglo sigue aún presente entre los cubanos. Pero Playa Girón es ahora una apacible zona costera con algunos hoteles especializados en el buceo, que atrae a turistas por sus aguas transparentes en las que disfrutan de la contemplación de exóticos peces y arrecifes de coral.

Este mes de mayo se ha abierto aquí un Centro Internacional de Buceo, cuya particularidad es que se puede practicar en una zona cercana a la costa y eso permite evitar el vértigo en los barcos.

En esta bahía hay una caída a apenas 30 metros de la orilla del mar que se prolonga unos 30 kilómetros, desde Playa Larga a Playa Girón, un fenómeno natural que ha creado una pared de 300 metros de altura, lo que permite que se pueda bucear en la zona sin la ayuda de ninguna embarcación.

La Bahía de Cochinos, dice la leyenda, debe su nombre a que cuando no existía población, solo estaba habitada por animales jíbaros. Es rica en corales, gorgonias, esponjas y una gran biodiversidad de flora y fauna marinas, que incluye especies endémicas.

Y si se trata de bucear en la historia, en la cercana ciudad de Santa Clara se encuentra el Mausoleo que alberga desde 1997 los restos del guerrillero Ernesto Che Guevara, cuando fueron trasladados desde Bolivia, donde falleció.

En Santa Clara, en diciembre de 1958, Guevara logró descarrilar un tren blindado que transportaba a más de 350 soldados gubernamentales y armamento al este del país. Esa victoria dicen los historiadores que marcó la salida del poder de Fulgencio Batista y el éxito de la revolución dirigida por Fidel Castro.

La directora del complejo honorífico, Mayra Romero Bermúdez, cuenta que reciben una media de 800 a 900 visitantes diarios, nacionales y extranjeros, sobre todo europeos, y entre los latinoamericanos sobresale Argentina, donde nació el Che.

En el museo se pueden ver fotos de Guevara, cartas que cruzó con Fidel Castro, su bata de médico y otros objetos relacionados con su vida. Una gran estatua del guerrillero domina la inmensa explanada exterior, en la que también se ha colocada una fotografía del fallecido presidente venezolano en la que se lee "Chávez, nuestro mejor amigo".

Chávez realizó en esta plaza el 14 de octubre de 2007 su habitual y largo programa radiofónico Aló presidente, en el que expresó su admiración por Fidel Castro y la emoción de estar en la plaza que simbolizaba la unidad latinoamericana.

En el mismo escenario fue donde Fidel Castro sufrió en 2004 la caída en la que se rompió un brazo ante miles de personas que participaban en un acto público bajo un sol de justicia, imagen que dio la vuelta al mundo.