Pamplona ha dado este miércoles su último adiós al actor navarro Alfredo Landa, fallecido el pasado 9 de mayo a los 80 años de edad, en un emotivo funeral que ha tenido lugar en la iglesia de San Nicolás, mismo templo donde fue bautizado.

La misa en recuerdo del intérprete se ha celebrado a partir de las 20 horas, después de que esta mañana sus cenizas hayan sido depositadas en el cementerio de la capital navarra en un acto celebrado en la intimidad y al que han asistido la viuda del actor, Maite Imaz, y sus hijos.

El funeral, que han organizado en representación de la familia, amigos navarros muy cercanos a ésta, precede al que tendrá lugar en Madrid la semana que viene.

En la eucaristía han estado presentes su viuda, hijos y nietos, así como amigos y allegados al actor. Además, han asistido la presidenta del Gobierno de Navarra, Yolanda Barcina, la delegada del Gobierno en la Comunidad foral, Carmen Alba, el consejero de Cultura, Turismo y Relaciones Institucionales del Ejecutivo foral, Juan Luis Sánchez de Muniáin, y el alcalde de Pamplona, Enrique Maya.

La misa, oficiada por el párroco de la iglesia de San Nicolás de Pamplona, Santiago Cañardo, ha contado con la música del Orfeón Pamplonés, que ha interpretado obras de Bach, Schubert, Gorriti, Ondarra, Tagliabue y fragmentos de la Misa de Difuntos Gregoriana.

Durante la homilía, el párroco ha afirmado que Alfredo Landa fue "una gran persona, un gran navarro y un gran hijo de esta ciudad" y ha valorado que el actor "siempre mantuvo vivas sus raíces, tanto humanas como cristianas, y volvió a ellas". Cañardo también ha puesto de relieve "la faceta humana y familiar" de Alfredo Landa, que "antes que actor, fue buen esposo y buen padre de familia".

Palabras de su hijo

Uno de los momentos más emotivos del funeral ha llegado con las palabras que ha dirigido el hijo del actor, Alfredo Landa, a los asistentes a la misa, a los que ha querido agradecer su asistencia y el "cariño" mostrado hacia su padre.

El hijo del intérprete ha tenido que interrumpir su lectura por la emoción, por lo que ha recibido los aplausos de los asistentes. Posteriormente, ha continuado señalando que Alfredo Landa "siempre ha profesado un gran amor a Pamplona y a Navarra" y ha asegurado que "se sentiría muy orgullo de todo el cariño que los pamploneses le han dado". "Es el más maravilloso padre que se puede tener", ha concluido.

Tras las palabras del hijo de Landa, el Orfeón Pamplonés ha interpretado Agur Jesusen ama, una canción solicitada por la familia por el cariño que el actor le tenía. Para finalizar, Mari Cruz Corral, orfeonista, ha cantado la Jota a San Fermín que interpreta todos los años en la Procesión del Santo, otro de los momentos más emotivos de la eucaristía.

Alfredo Landa nació el 3 de marzo de 1933 en la calle San Antón de Pamplona y aunque a los 6 años de edad se fue a Figueras y a las 12 años a San Sebastián, siempre mantuvo muy presentes sus raíces navarras. En 2008 el intérprete recibió el premio Príncipe de Viana de la Cultura.