La dirección del PSOE-A ha confiado este lunes en que se alcance cuanto antes un acuerdo sobre el objetivo de déficit para este año, que tenga en cuenta las especificidades de cada comunidad, de manera que el Gobierno central deje de tomar decisiones de manera unilateral.

El vicesecretario general del PSOE-A, Mario Jiménez, ha manifestado en rueda de prensa que el objetivo de déficit debe tener en cuenta las especificidades de cada comunidad y establecerse conforme a criterios que recojan, en el caso de Andalucía, su nivel de población, su nivel de endeudamiento y su voluntad de atender políticas públicas indispensables.

Ha criticado que, hasta ahora, el Gobierno de la Nación haya optado por tomar decisiones de manera unilateral, fijando un reparto del objetivo de déficit totalmente perjudicial para las comunidades, a las que se les exige un recorte de 6.000 millones de euros, mientras que el Estado se reserva el mismo nivel de déficit que en el ejercicio de 2012.

De otro lado, el dirigente socialista ha manifestado que, de manera inmediata, el Gobierno tiene que poner fin a su actitud de "soberbia" y sentarse a la mesa del diálogo para posibilitar un gran acuerdo económico y una gran alianza nacional contra la exclusión social.

Según Mario Jiménez, las encuestas que se han publicado este fin de semana en diversos medios de comunidad ponen de manifiesto que más del 70 por ciento de los españoles le dan la razón al presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, en su planteamiento sobre la necesidad de pactos nacionales.

"Ese llamamiento al diálogo de la sociedad tiene que tener una respuesta desde el Gobierno central", según Mario Jiménez, que ha puesto en valor el paquete de medidas para la recuperación económica que ha puesto sobre la mesa el secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba.

Ha insistido en que el Ejecutivo de Mariano Rajoy tiene que dejar de lado la "soberbia" y escuchar a los miles de ciudadabos que están reclamando un gran acuerdo nacional para la recuperación económica. Ya es hora, según ha apuntado, de que el PP se dé cuenta de que con sus políticas se destruyen 2.600 empleos diarios en este país.