La delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes, ha afirmado este lunes que el movimiento 15-M ha avanzado hacia "posiciones más radicales" tras dos años de vida, pero ha reconocido que algunas de sus propuestas ya están en las agendas de los partidos políticos.

Cifuentes ha reconocido en un desayuno informativo  que el 15-M fue "un movimiento pionero que supuso una fuerte crítica al sistema, compartida en mayor o menor medida por muchos ciudadanos, participantes o no, en las manifestaciones y asambleas organizadas por sus promotores, un movimiento que constituyó el punto de partida de muchas otras iniciativas de carácter reivindicativo que han tenido la calle como principal escenario".

Además, ha señalado que como democracia representativa que es España, los partidos "también  debe ser receptiva a los planteamientos que formulan los ciudadanos a través de los movimientos sociales, cuando siguen los cauces legales y se plantean reivindicaciones legítimas y posibles".

La delegada del Gobierno ha afirmado que a lo largo de los dos años transcurridos desde su nacimiento, algunas de las propuestas del 15-M y otros movimientos sociales "que en un principio parecían utópicas, han pasado a formar parte de la agenda de los propios partidos políticos".

"Y es lógico que sea así, porque la democracia y las instituciones en las que se materializa, deben tratar en la medida de lo posible de ser permeables a las propuestas de los ciudadanos, contribuyendo así a evitar la existencia de una brecha insalvable entre la calle, los partidos y el Parlamento", ha apuntado.

Cifuentes considera que los partidos, el Parlamento y los movimientos sociales "son piezas imprescindibles de una democracia viva y elementos esenciales para la convivencia en libertad, porque ni todas las propuestas que formulan estos movimientos son rechazables y deben ser estigmatizadas por su origen, ni todas, por supuesto, pueden ser asumidas de manera directa e inmediata". Eso sí, para la delegada, deben hacerlo mediante los representantes legítimamente elegidos "y utilizando los mecanismos legales, como las iniciativas legislativas populares".

"No hay que olvidar que los movimientos sociales pueden tratar de conformar la voluntad del Parlamento y del Gobierno, pero no son ni pueden sustituir a las instituciones democráticamente elegidas con el voto de los ciudadanos", ha concluido.

La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, ha alabado la labor de Cifuentes, y su "equidad" a la hora de respetar los derechos tanto de quienes participan en manifestaciones como de los ciudadanos que no lo hacen.

Cospedal ha presentado a Cifuentes en este desayuno y ha recordado que Madrid es "el escaparate de toda España", sobre todo fuera del país, y todo lo que pasa en la capital "se cuenta como lo que pasa en España para el resto del mundo".  Por eso ha alabado la forma en la que Cifuentes está gestionando la seguridad madrileña.

"En un momento muy difícil para los madrileños y todos los españoles se puede gestionar defendiendo derechos y libertades de ciudadanos con equidad y justicia", ha señalado la también presidenta castellanomanchega.

María Dolores de Cospedal también ha destacado de la delegada del Gobierno su "cordialidad", una cualidad que no tiene por qué, ha señalado, estar reñida con la política, y que Cifuentes muestra con adversarios y compañeros de filas.