Rajoy insiste en que el "test de credibilidad" de la Unión Europea es "la unión bancaria"

  • Los jefes de Gobierno ibéricos unieron sus voces para exigir un giro a Europa.
  • Aseguraron que el desempleo juvenil es "una tragedia" contra la que lucharán.
  • Rajoy se refirió a las manifestaciones de este fin de semana, y señaló que comprende que sus políticas "no gusten a mucha gente".
  • El Palacio de la Moncloa albergó la XXVI cumbre bilateral, en la que participaron un total de quince ministros de ambos gobiernos.
  • De forma paralela, se reunieron en Madrid representantes de las organizaciones empresariales de los dos países.
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, junto al primer ministro de Portugal, Pedro Passos Coelho, en la rueda de prensa conjunta que han ofrecido este lunes en el Palacio de la Moncloa.
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, junto al primer ministro de Portugal, Pedro Passos Coelho, en la rueda de prensa conjunta que han ofrecido este lunes en el Palacio de la Moncloa.
Juan Carlos Hidalgo / EFE
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, junto al primer ministro de Portugal, Pedro Passos Coelho, en la rueda de prensa conjunta que han ofrecido este lunes en el Palacio de la Moncloa.

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha indicado este lunes que la UE "puede y debe hacer más" y ha añadido que el "test de credibilidad" de Europa es la "unión bancaria", al tiempo que ha pedido a la UE medidas para asegurar el crédito a familias y pymes y para paliar el "gran problema" del paro juvenil.

En la rueda de prensa posterior al encuentro con el primer ministro de Portugal, Pedro Passos Coelho, el jefe del Ejecutivo indicó que es "imprescindible" que la UE adopte, "en paralelo" a los esfuerzos nacionales, "medidas de acompañamiento", entre las que citó el cumplimiento del calendario para la unión bancaria, así como medidas para facilitar el crédito a familias y pymes y para reducir el paro juvenil, que calificó de "urgencias nacionales y europeas".

"Ambos coincidimos en que la UE puede y debe hacer más (...), no tenemos tiempo que perder, los próximos meses serán muy importantes", subrayó Rajoy, quien añadió que ambos mandatarios han acordado intensificar los contactos entre sus gobiernos para concretar posturas y proponer nuevas medidas en la UE.

El jefe del Ejecutivo volvió a poner de ejemplo el caso de Chipre, del que dijo "no se habría producido" si hubiese existido la unión bancaria, de la que destacó sus "ventajas", tales como la creación de un único supervisor bancario o la creación de un fondo de depósitos europeo, además de "separar el riesgo soberano del riesgo bancario".

Por otro lado, el jefe del Ejecutivo español ha expresado su más "firme y solidario" apoyo a las medidas y reformas del gobierno portugués, y ambos han convenido acrecentar los contactos entre gobiernos para "concertar posturas y proponer nuevas medidas que desde la UE puedan tomarse en los próximos meses".

Sobre las manifestaciones celebradas este fin de semana en varias ciudades españolas, con motivo del segundo aniversario del movimiento 15-M, Rajoy reiteró que comprende que sus medidas "no gusten a mucha gente", pero que todas las decisiones "tienen un sentido".

Las reformas, el único camino

El presidente del Gobierno también resaltó la necesidad de una "rápida conclusión" del próximo marco financiero de la UE, con la finalidad de poder desplegar cuanto antes el fondo de empleo juvenil, los nuevos fondos de cohesión o la Política Agraria Común (PAC).

Rajoy, que defendió igualmente las "imprescindibles reformas" económicas para crecer y crear empleo Y la necesaria política de austeridad, reiteró una vez más que "el euro no se va a romper" y que los estados miembros saldrán "más fuertes" de la crisis y se preservará el marco de bienestar común.

"No hay otra manera de construir Europa", señaló el presidente del Gobierno, al referirse a "las reformas europeas", como la "solución de los grandes desequilibrios europeos".

"Así, reiteramos nuestro compromiso de continuar con las reformas de nuestras economías para modernizarlas y hacerlas competitivas, y sanear nuestras cuentas para generar confianza", insistió Rajoy, tras afirmar también que apoya tanto al gobierno portugués como las medidas que ha adoptado.

Objetivo: analizar las medidas contra la crisis

El Palacio de la Moncloa albergó la XXVI cumbre bilateral, la segunda que presidían Rajoy y Passos Coelho.

La cita sirvió para analizar las reformas que ante la crisis siguen poniendo en marcha en sus países y para repasar las que están en curso en la Unión Europea y que ambos consideran que son un complemento imprescindible a las de los socios comunitarios para allanar ese camino.

En el marco de esta cumbre, representantes empresariales de los dos países también celebraron reuniones, con el fin de establecer nuevas relaciones económicas o reforzar las ya existentes.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento