La Policía Nacional de Oviedo ha detectado distintos hurtos a personas ancianas que suelen suceder a principios del mes, cuando los pensionistas acuden a una entidad bancaria a retirar su pensión. Es habitual también que extraigan todo el importe en una única vez, circunstancia es aprovechada por los delincuentes.

Según ha informado la Policía a través de una nota de prensa, ese fue el caso de una señora nacida en 1937 que fue a una sucursal bancaria en Oviedo, de donde extrajo 1.600 euros, y desde allí se dirigió directamente a una pescadería de las inmediaciones del banco. El sobre con la cantidad que había extraído lo tenía en un bolsillo del abrigo.

Fue seguida por dos mujeres, que a la pescadera le infundieron sospechas, por lo que decidió llamar a su marido, que se había ausentado un momento.

Al llegar el dueño de la pescadería, le preguntó a la anciana si le faltaba algo, apercibiéndose entonces de la desaparición del sobre con el dinero que había sacado del banco, y que según manifestó, era para pagar la residencia de un hijo discapacitado que se encuentra ingresado por no poder ella atenderlo.

Iniciadas las investigaciones por los policías, se pudo determinar que las autoras, a quienes los dueños de la pescadería reconocieron sin ningún género de dudas, fueron dos mujeres, con antecedentes por este tipo de delitos, que constituyen un grupo organizado para delinquir, que se desplaza por todo el territorio a nivel provincial y nacional, actuando siempre en grupos de dos o tres personas.

Están especializadas en hurtos a personas mayores, que vigilan generalmente en los establecimientos bancarios o a su salida, los cuales, por su avanzada edad y su movilidad reducida son víctimas fáciles para ellos.

La Policía Nacional solicita la colaboración ciudadana para atajar este tipo de hechos, especialmente si se detecta a alguien en actitud vigilante por las inmediaciones de los establecimientos bancarios. Algunas veces intentan disimular pidiendo o recogiendo firmas para distintas asociaciones.