Fue en Valencia, en el hospital La Fe, donde el equipo médico encabezado por el cirujano Pedro Cavadas ha realizado el séptimo trasplante de este tipo en todo el mundo, el primero realizado con éxito a una mujer.

La intervención, que duró diez horas, permitirá a Alba «llevar una vida independiente y poder encontrar un trabajo remunerado», según el doctor Cavadas. Vestirse o hacer la comida dejarán de ser una pesadilla para ella.

El principal riesgo es el posible rechazo, presente en cualquier trasplante. Para que no ocurra, tendrá que medicarse de por vida. Si todo va bien, en cinco o seis meses ya tendrá sensibilidad en sus nuevas extremidades.

Las nuevas manos incluyen los antebrazos (seis centímetros por encima de la muñeca) y, según el doctor, son mejores que una prótesis.

Alba aseguró encontrarse «muy bien y feliz», ya que la intervención le dará «una vida totalmente diferente». Cuando se despertó de la anestesia vio «preciosas» sus nuevas manos, explica.

La operación abre «una vía de esperanza para este tipo de personas» en la Comunitat, destaca Pedro Cavadas. No obstante, los futuros trasplantes dependerán del número de donantes.

Claves de la operación

Tiempo transcurrido: Los 28 años que Alba ha estado sin manos suponen el mayor obstáculo para su recuperación.

Órgano a la vista: El seguimiento será más fácil, ya que los brazos están a la vista, no como los órganos internos.

Vencer el rechazo: Según los médicos, la regeneración de los nervios es más difícil cuanto más alejado está el órgano del cerebro. La cirugía es similar a la de un reimplante.