Los bomberos del Parque Municipal de Cuenca han logrado controlar sobre las 14.30 horas de este viernes el incendio declarado en una nave del polígono SEPES, donde se almacenaban productos inflamables y en algunos casos tóxicos, como pinturas, barnices, lubricantes, aceites, gasoil o botellas de butano.

Según ha informado en nota de prensa el Consistorio, no se ha llegado a producir nube tóxica, a pesar de la alta columna de humo que desde las 13.00 horas aproximadamente podía verse desde algunos puntos de la ciudad.

La nave está dividida en tres cuerpos. El fuego se ha originado en el cuerpo central de la misma, al parecer por la caída de una carretilla que transportaba azufre.

La actuación de los bomberos se ha centrado en confinar el fuego a este cuerpo central para evitar que se propagase a la parte trasera donde se encuentran los depósitos de combustible que abastecen a los camiones distribuidores de la empresa y un acopio de botellas de butano.

Dice el Consistorio que la actuación de los efectivos del Parque Municipal de Bomberos de Cuenca ha evitado que el incendio se propagase hasta ese punto y que adquiriera magnitudes mucho más graves, si bien las oficinas y el cuerpo central han ardido, llegando incluso a derrumbarse el techo de esta última parte de la instalación.

Hasta un total de 13 bomberos han intervenido en el incendio, apoyados por la Policía Local, Protección Civil, Policía Nacional y medios sanitarios. En cuanto a los medios materiales, se han desplazado cuatro vehículos, entre ellos el camión escala. También se ha contado con un camión cisterna de 35.000 litros del Consorcio 112.

Un trabajador de la empresa ha sufrido quemaduras y ha sido trasladado inicialmente al Hospital Virgen de la Luz de Cuenca, aunque posteriormente se le ha derivado a un centro hospitalario de Getafe.

Hasta el lugar del siniestro se ha desplazado el alcalde, Juan Ávila, acompañado por la concejala de Seguridad, Nieves Mohorte, y el primer teniente de Alcalde, Darío Dolz.