Las fuerzas de seguridad y los servicios sanitarios de emergencia han logrado rescatar la tarde de este jueves a un inmigrante subsahariano en un doble fondo de un vehículo que ha sido abandonado por un traficante de seres humanos en el barrio Real de Melilla, después de lograr superar los controles policiales en la frontera con Marruecos.

La voz de alarma la dio cerca de las 19,00 horas una mujer que oyó los gritos y lamentos del inmigrante atrapado en un hueco del vehículo en el que apenas podía respirar por sus reducidas dimensiones, que había sido estacionado en la calle Zamora, junto al Parque Don José Gambero.

Según testigos presenciales, el indocumentado "ha sufrido mucho" porque se estaba asfixiando debido a las elevadas temperaturas que se han dado este jueves en la ciudad, que rondan los 30 grados centígrados. Tras oír sus lamentos, una mujer que pasaba por la calle Zamora llamó al Servicio de Emergencias 112 y comunicó el suceso, lo que conllevó la actuación de las fuerzas de seguridad y los servicios sanitarios urgentes para auxiliar al inmigrante.

El traficante de seres humanos, por parte, no ha sido localizado después de abandonar el vehículo con un subsahariano aprisionado en su interior, en un doble fondo practicado al automóvil, un lugar del que requirió ayudar para poder salir.

El inmigrante, después de que se la abra expediente de expulsión por entrada ilegal en territorio nacional, ha sido ingresado en el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI), donde permanecerá hasta que se resuelva dicho expediente, que suele durar meses y muchas vez no puede concluirse con su repatriación debido a la negativa del país al que dice pertenecer a aceptarle como ciudadano propio.