Colonos judíos protagonizaron ataques contra palestinos y sus propiedades después de que un palestino matara este martes a un israelí residente en un asentamiento de Cisjordania en un cruce del territorio ocupado, según medios locales.

Tras la muerte del colono judío en la mañana de este martes, varios vehículos palestinos fueron blanco de ataques con piedras, algunos de los cuales reventaron o dañaron sus lunas, incluido un autobús de transporte escolar en el que viajaban niñas y cuyo conductor fue herido y trasladado a un hospital.

De acuerdo a las primeras investigaciones, colonos judíos están detrás de estos ataques y actos de vandalismo que incluyen el incendio de árboles y locales en pueblos palestinos del sur de Nablús.

Por temor a que la violencia continúe en los próximos días, Israel ha desplegado a un importante número de fuerzas de seguridad en la zona.

La víctima mortal israelí fue identificada como Avitar Borobsky, en la veintena, padre de cinco hijos y residente del asentamiento de Itzhar, en el norte de Cisjordania.

El palestino autor del ataque se acercó al colono en una parada de autobús del concurrido cruce de Tapuah, próximo al asentamiento de Ariel, en el norte de Cisjordania, y le apuñaló antes de quitarle el arma que llevaba.

Aún no está claro si el palestino abrió luego fuego a bocajarro contra el colono o contra un policía de fronteras que se encontraba en la zona y que le hirió de un disparo, precisó el capitán Barak Raz, portavoz de la división del Ejército israelí en Cisjordania, en conversación telefónica con un grupo de periodistas.

El palestino fue arrestado en el lugar del ataque e ingresado en un hospital en Israel para ser interrogado, precisó la Policía israelí.

Medios locales señalan que el atacante, Salam Zaal, de 24 años, era militante del grupo Al-Fatah, residente en una aldea próxima a Tulkarem, y cuyo hermano había sido detenido y condenado a prisión por la Autoridad Nacional Palestina (ANP) el lunes acusado de colaborar con Israel.

Los organismos de defensa barajan la posibilidad de que la acción se tratara de un acto individual para demostrar el honor de la familia y que no colabora con los servicios de inteligencia israelí.

Este es el primer ataque letal contra un ciudadano israelí en Cisjordania desde septiembre de 2011, precisan medios locales.

Tras la muerte de Borobsky, unos estudiantes de una escuela rabínica de Jerusalén, identificada con los sectores más radicales, asaltaron con gas lacrimógeno a un grupo de investigadores de la Policía que hablaban en árabe. Uno de ellos logró arrestar a uno de los estudiantes y otro fue evacuado a un hospital con heridas leves.

La ministra israelí de Justicia, Tzipi Livni, se reunió recientemente con líderes de los colonos para analizar formas de frenar la violencia de los sectores más radicales y entre ellas, espera endurecer las medidas contra los autores de los ataques.

Los colonos y extremistas de derechas suelen llevar a cabo acciones que enmarcan como "política de precio", con las que atacan a palestinos, propiedades palestinas, del Ejército israelí, cementerios y santuarios musulmanes o cristianos, para manifestar su disconformidad con políticas del Gobierno de Israel como la evacuación de enclaves en territorio ocupado.