La lápida de la escritora británica Anne Bronte, la menor de las hermanas Bronte, ha sido corregida, con 164 años de retraso, por la asociación que vela por el legado literario de la familia, ha informado la cadena británica BBC.

El epitafio, creado tres años después de la muerte de Anne en 1849, contenía en principio cinco errores que fueron descubiertos en un primer momento por Charlotte Bronte, autora de Jane Eyre, en una de sus visitas a la tumba de su hermana, de los que entonces solo se corrigieron cuatro.

La pequeña de los Bronte, que falleció como consecuencia de una tuberculosis a la edad de 29 años, es el único miembro de la familia que no recibió sepultura en su hogar natal y fue enterrada en la localidad inglesa de Scarborough, donde la placa conmemorativa de su tumba aseguraba que murió a los 28 años, error ahora subsanado.

Aquejada de la enfermedad pulmonar, Anne decidió trasladarse en 1849 a Scarborough, en la costa de Inglaterra, con la esperanza de que el clima mejorara su estado, pero la autora de La inquilina de Wildfell Hall y Agnes Grey falleció tres días después de su llegada.

Su muerte sacudió a la familia, que aún lloraba la pérdida del hermano Branwell y de Emily, autora de Cumbres borrascosas, también como consecuencia de tuberculosis, menos de un año antes.

La sociedad Bronte, que vela por el legado literario de las tres hermanas, ha instalado una nueva placa junto a la original, deteriorada con el paso de los años, en la que se dice que Anne falleció a los 29 años.

Considerada la más tímida de las tres hermanas escritoras, Anne ha gozado de enorme popularidad y también críticas por los temas que abordaban sus obras, como en el caso de La inquilina de Wildfell Hall, donde se trata el problema del alcoholismo y los efectos devastadores que la adicción tiene en una familia.

La independencia de la mujer fue otro de sus pilares narrativos al igual que en el resto de sus hermanas, algo que ha hecho que con el paso del tiempo sus obras hayan ganado un mayor reconocimiento.