Los osos panda gemelos de Madrid viajan a China para perpetuar la especie

  • Se llaman Po y De-De y nacieron hace dos años en el Zoo de Madrid.
  • Viajarán a la reserva China de Chengdu, donde hay más de un centenar de osos de su especie, para reproducirse y evitar que se extingan.
  • Los osos panda gigante son la especie más amenazada del planeta y solo quedan unos 1.500 ejemplares en todo el mundo, 300 de ellos en cautividad.
Po y De-De, los osos que viajarán a China a mediados de mayo.
Po y De-De, los osos que viajarán a China a mediados de mayo.
EFE
Po y De-De, los osos que viajarán a China a mediados de mayo.

Po y De-De nacieron hace poco más de dos años en el Zoo de Madrid y ahora estos osos panda gigante gemelos viajarán a China, el país de origen de sus padres, donde se integrarán en un centro de cría para reproducirse y evitar que se extinga su especie, la más amenazada del planeta.

Mientras tanto, los dos cachorros, que ya pesan más de 80 kilos, se preparan para un largo viaje (previsto para después del 16 de mayo) que durará más de 20 horas y en el que tendrán que trasladarse en un avión y varios camiones hasta llegar a la reserva china de Chengdu, en la provincia de Sichuan, al sudoeste del país.

Allí convivirán con más de un centenar de osos panda gigantes con el objetivo de reproducirse, ya que además de hermanos Po y De-De son machos y los otros dos ejemplares de su especie que hay en las instalaciones son sus padres, que nacieron en la misma reserva donde en menos de un mes se quedarán a vivir sus crías.

La conservadora de mamíferos terrestres del Zoo de Madrid, María Delclaux, asegura que este procedimiento de intercambio de ejemplares entre zoos y reservas es algo habitual y, aunque es la primera vez que lo hacen con osos panda, ya ha ocurrido con gorilas, elefantes y tigres.

"Hacemos muchos viajes porque si nos quedáramos solo con nuestra población local tendríamos un alto grado de consanguineidad", explica.

Su día a día

En sus últimos días en Madrid, Po y De-De siguen con sus actividades habituales: se levantan antes de las 9 de la mañana, cuando llegan sus cuidadores, que les pesan y les abren las puertas de acceso a la pradera anexa a su habitación, en la que comen, duermen y juegan.

"Se pasan la tarde jugando", dice sonriente su cuidadora, María Alfaro, que confirma el carácter afable que caracteriza a estos animales, uno de los que despiertan más admiración entre los pequeños que visitan el parque.

María conoce bien a los gemelos, sabe que la manzana es uno de los alimentos que más les gustan (aunque también toman pienso y bambú) y además de las pequeñas diferencias físicas entre uno y otro, también les distingue por su carácter.

Considera que De-De, cuyo nombre en chino es una forma coloquial de referirse a Madrid, es "más tranquilo", mientras que Po, que en español podría traducirse como "naturaleza inocente", es "más ansioso".

Estos días, la rutina de los gemelos solo se ha visto interrumpida por unos entrenamientos en los que sus cuidadores les están enseñando a entrar y permanecer un tiempo en una caja similar a la que se usará para transportarlos en el avión, para acostumbrarles y evitar que padezcan estrés.

En el vuelo a China, que también llevará pasajeros, contarán con un cuidador que tendrá acceso constante a la bodega para hacerles el trayecto lo más cómodo posible.

La especie más amenazada

El oso panda gigante es la especie más amenazada del planeta: en todo el mundo quedan alrededor de 1.500 ejemplares, de los cuales viven en cautividad en torno a 300.

Actualmente en Europa solo existen diez ejemplares en Austria, Francia, Escocia y España, donde el Zoo de Madrid cuenta con una "familia" de cuatro miembros, los únicos en España, que se verá reducida a dos tras la marcha de Po y De-De.

Estos cachorros son la segunda pareja de osos panda gigante que nacen en el Zoo de Madrid tras el famoso Chulín, ya fallecido, que tuvo un hermano gemelo que murió al poco tiempo de nacer, algo habitual en estos casos.

Los osos panda tienen una o dos crías, pero cuando el parto es doble solo sobrevive uno de los hijos porque nacen muy frágiles (ciegos, sin pelo y de un tamaño muy reducido) y la madre no puede atender correctamente a los dos, por lo que opta por el más fuerte, como explica la cuidadora del Zoo, que es bióloga de formación.

Para evitar que ocurriera con Po y De-De, tras el parto se intercambiaron las crías a la madre cada cuatro horas para que las dos pudieran recibir leche materna, mientras la otra permanecía en una incubadora y era alimentada con biberones.

Ahora en el Zoo de Madrid confían en que los padres de los gemelos puedan tener más descendencia, una tarea que no resulta nada fácil porque el celo de la hembra dura solo tres días al año.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento