ANAR recibió en 2012 más de 2.100 llamadas de petición de ayuda de menores en Baleares

La Fundación ANAR de Ayuda a Niños y Adolescentes en Riesgo recibió en 2012 un total de 2.190 llamadas de petición de ayuda realizadas por menores, que denunciaban, entre otros aspectos, episodios de violencia, lo que supone un incremento del 6,2%, en relación al año anterior, cuando se contabilizaron 2.061. Del total de llamadas recibidas en las islas, el 33,80% (740) correspondió a casos por violencia.
Rueda de prensa de la Fundación ANAR
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EUROPA PRESS
Rueda de prensa de la Fundación ANAR

La Fundación ANAR de Ayuda a Niños y Adolescentes en Riesgo recibió en 2012 un total de 2.190 llamadas de petición de ayuda realizadas por menores, que denunciaban, entre otros aspectos, episodios de violencia, lo que supone un incremento del 6,2%, en relación al año anterior, cuando se contabilizaron 2.061. Del total de llamadas recibidas en las islas, el 33,80% (740) correspondió a casos por violencia.

Así lo revela el 'Informe ANAR 2012: Violencia Infantil en España', presentado este jueves en Madrid en el Día Internacional de la Lucha Contra el Maltrato Infantil, que revela que las islas, donde residen 200.506 menoers, fueron la Comunidad Autónoma que menos llamadas de este tipo recibió el pasado año.

Concretamente, el 27,3% de las llamadas recibidas en la línea del menor se refirieron a dificultades de relación; el 22,7% a problemas sentimentales; el 18,1% a violencia contra niños; el 13,6% a problemas escolares; el 9% a problemas de sexualidad; el 4,5% a adicciones y el 4,5% a problemas psicológicos.

Cabe recordar que el Govern cedió el número 116 111 en el ámbito de la Comunidad Autónoma a la Fundación ANAR, al tiempo que el Ejecutivo balear, a través de la Oficina de Defensa de los Derechos del Menor de la Conselleria de Salud, Familia y Bienestar Social, presta desde el 2012, permite que ANAR gestione el 'Teléfono de Ayuda a Niños y Adolescentes', con el fin de "potenciar la prevención y coordinación de las actuaciones y lograr la resolución de situaciones de riesgo entre los menores".

A nivel estatal, la Fundación ANAR ha atendido 1.778 casos de maltrato de gran violencia contra niños y adolescentes a lo largo del año 2012, lo que supone un 13,6 por ciento más de las denuncias recogidas en 2011.

El citado informe muestra, además, que el pasado año la Fundación atendió un total de 324.643 llamadas de petición de ayuda realizadas por menores, de las que 5.922 comprendían casos graves y entre las que recibieron esas 1.778 llamadas, de las que el 28,7 por ciento responde a maltrato físico; el 15,5 por ciento a violencia escolar; el 14,7 por ciento a maltrato psicológico; el 12,4 por ciento sobre abuso sexual; el 6,9 por ciento son denuncias sobre violencia de género; y el 1,5 por ciento sobre pornografía infantil.

En cuanto a los casos de violencia escolar, el director de Programas de ANAR, Benjamín Ballesteros, ha señalado que se trata del segundo motivo de llamada por violencia ejercida hacia un niño en España.

Respecto a la violencia de género, que afecta principalmente a niñas y adolescentes de entre 13 y 17 años, ha indicado que el año pasado la Fundación detectó 122 casos de menores que sufrían la violencia de género directamente de sus propias parejas, de las que el 67,4 por ciento no eran conscientes de que estaban siendo víctimas de violencia de género.

"Tenemos casos de niñas que con 12 años mantienen relaciones con personas adultas y en España cuando se alcanzan los 13 años es considerado como algo legal, y esto tiene que cambiar", ha aseverado.

Además, Ballesteros ha apuntado que ANAR ha atendido 565 casos —que no se han recogido en este análisis— de niños que han sufrido violencia de género directamente dentro del entorno familiar, a través de las agresiones efectuadas por el padre a la madre.

Respecto a las nuevas tecnologías, el director de Programas ha destacado que "se están convirtiendo en un aliado de la violencia, que trae nuevas formas de agredir muy graves de ciberacoso y abuso sexual en la red". "Cuando los niños hablan con nosotros nos trasmiten la desesperación, el acoso y la tensión tan grande que sufren, que en muchas ocasiones les lleva a plantearse terminar con su vida", ha explicado.

Por otro lado, ha recordado que el perfil principal de los agresores es el del padre, con un 22,5 por ciento; seguido por el de los compañeros de colegio, con un 18,4 por ciento; el de la madre, con el 15, 5 por ciento; las parejas o ex del menor, con un 8,2 por ciento; o ambos padre, con un 6,3 por ciento.

Ante esto, Ballesteros ha alertado de que con estos datos se ha descubierto "algo dramático, como es que las personas que deberían proteger y cuidar de los niños, sean precisamente quienes les están agrediendo". Asimismo, ha destacado que la violencia hacia los menores se produjo en el 46,1 por ciento de los casos de forma diaria y además, el 43,5 por ciento la sufrieron a lo largo de un año.

Guarda silencio y aprende a tolerar

A pesar de todas estas cifras, el director de Programas de ANAR ha asegurado que "la inmensa mayoría de los niños no le han contado a nadie su situación, porque sienten que nadie les cree". "Esto provoca que el menor tenga la sensación de que nadie le apoya y que nadie le cree, se le revictimiza, aprende a guardar silencio y lo que es peor, aprende a justificar esa violencia y tolerarla para el día de mañana reproducirla", ha precisado.

Por su parte, el director general de ANAR, Tomás Lagunas, ha reconocido que "lo que hay detrás de estas situaciones podría ser una señal del fracaso del modelo educativo o una señal de la incompatibilidad entre la vida familiar y laboral". Sin embargo, Ballesteros ha asegurado que "se está olvidando a la infancia, y si no se educa ahí, el futuro no va a ser muy esperanzador".

Una de las propuestas es la planteada por la abogada del teléfono de ANAR, Leticia Mata, quien ha destacado que debería existir una ley integral contra la violencia infantil, al igual que la existente contra la violencia de género. Además, ha señalado que uno de los objetivos es la creación de un Registro Unificado para detectar la violencia infantil —que sustituya al registro conocido como RUMI—, que "aporte datos reales para poder hacer políticas de prevención".

Por último, la Fundación ha anunciado que contarán con una novedosa campaña publicitaria, realizada mediante un sistema conocido como MUPI, que permite transmitir dentro de un mismo soporte dos mensajes a diferentes alturas para que los menores perciban una información que será imperceptible para los adultos, y que en este caso mostrará el número de teléfono de ANAR y un mensaje animándoles a contactar con ellos.

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