El consejero de la Presidencia y portavoz de la Junta de Castilla y León, José Antonio de Santiago-Juárez, ha calificado de "muy malos" los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) en la Comunidad, que supone un aumento de los parados en 21.800 personas y una tasa de paro de 22,71 por ciento, considera que muestran "la pero cara" y la "más dramática" de la crisis.

Sin embargo, el consejero ha manifestado su confianza en que las reformas estructurales emprendidas por el Gobierno, en línea de las que han llevado a cabo otros países que ya han salido de la crisis, beneficiarán la inversión y la creación de empleo y que de nuevo surja un "dinamismo económico".

De Santiago-Juárez ha negado que, como han señalado los sindicatos, se esté en una situación de "emergencia" en Castilla y León, aunque reconoce que son datos "muy malos" y reflejan seis años de crisis, pero es eso lo que considera que tiene que hacer "levantarse todos los días" para sacar al país adelante.

Por debajo de la media

En este contexto, el portavoz de la Junta ha incidido en que los datos del primer trimestre "siempre" tienden a ser malos y "acentúan la mala tendencia", pero al mismo tiempo ha señalado que son "menos malos" que la media nacional, ya que la tasa se sitúa en el 27,16 por ciento frente a un 22,71 por ciento en la Comunidad, por lo que aún hay una diferencia de más de cuatro puntos.

Además, ha incidido en que si la situación fuera de "emergencia" en Castilla y León habría que preguntar qué calificativo se aplicaría para comunidades como Andalucía o Extremadura, algo que ha aclarado que "no justifica" ante unos datos "muy malos".

En la misma línea, ha añadido que todos están "deseando y esperando" que "más pronto que tarde" se empiece a generar empleo y, cuando ocurra, al margen de los informes oficiales, se empezaría a hablar de recuperación y "no a nivel teórico" de si se crecería o no en próximos ejercicios.