El capitán del Real Madrid, Iker Casillas, aseguró que el Borussia Dortmund fue "justo vencedor" anoche en la Liga de Campeones y que su equipo tiene el convencimiento de remontar y debe "morir en el campo" en el partido de vuelta.

"Ayer las sensaciones no fueron buenas. Perder 4-1 en la ida de una semifinal es doloroso, pero después del partido empezamos a animarnos y a comprender que queda un partido de vuelta. Fue un resultado demasiado elevado para nuestros intereses, pero quedan 90 minutos y tenemos que morir en el campo", dijo.

Casillas, que presentó esta mañana sus nuevos guantes y botas en un acto publicitario de la firma Adidas, comentó que entre la plantilla "existe el convencimiento de remontar" y que "los más viejos del lugar recuerdan grandes eliminatorias en las que el Madrid tenía todo perdido y se clasificó".

"Llegábamos muy bien al partido, pero el Borussia hizo un planteamiento muy bueno y fue justo vencedor. Ahora jugamos en casa y después del resultado de ayer la gente está más motivada que nunca para la vuelta. Será el más importante de la temporada. Queremos que los jugadores y los aficionados se dejen el alma", señaló.

Pese a esto, Casillas indicó también que ahora "hay que cambiar el chip y pensar en el partido del sábado", contra el Atlético de Madrid en el Vicente Calderón, y explicó que está "bien físicamente, entrenando mucho ayudando al equipo en lo que pueda".

"Me toca vivir esto de una forma diferente a como lo he vivido en los últimos catorce años. Ahora me toca arropar a mis compañeros y entre ellos a Diego López que lo está haciendo muy bien", afirmó.

El capitán blanco aseguró que se está "entrenando bien" y negó que el entrenador madridista, el portugués Jose Mourinho, con el que guarda "una relación profesional", fuera frío con él.

"Mourinho no es frío conmigo, es honesto. Guardamos una relación profesional, de fútbol, que es lo importante, no personal. Pero, por encima del entrenador y de mí está el club, el Real Madrid", comentó.

"Estoy listo para jugar, pero quién decide es otra persona, no yo. El técnico tiene que ver que es lo mejor para el equipo. Tengo que esperar mi oportunidad, como le ha pasado a tantos otros jugadores, y aprovecharla cuando llegue. Después de tres meses estoy como un niño a punto de debutar", explicó el portero.

"Por encima de Iker Casillas está el club. Y eso es lo más importante, que el Real Madrid gane siempre", apuntó.