La Policía Nacional detuvo el pasado día 24 a una mujer de 34 años, GK.M.A., como presunta autora del hurto de joyas valoradas en unos 3.000 euros de un domicilio del Paseo General Dávila de Santander, en el que trabajaba como empleada de hogar.

El robo se produjo durante el primer trimestre de este año. La mujer carecía de antecedentes y quedó en libertad con la obligación de presentarse ante la autoridad judicial, han informado fuentes policiales.

El robo fue denunciado el pasado 11 de abril y habría tenido lugar entre el 1 de enero y el 15 de marzo, fechas en que los denunciantes habían tenido a prueba a una cuidadora para su hija menor, que al tiempo realizaba tareas domésticas durante dos días a la semana.

La mujer, que no había tenido en ningún momento llaves de la vivienda, accedía a ésta porque el hijo mayor le abría la puerta antes de salir de casa, quedándose sola durante dos horas, hasta que éste regresaba y ella se iba.

Las piezas de oro sustraídas, (tres medallas, tres alfileres, unos pendientes, dos anillos, tres cruces y seis pulseras), estaban valoradas entre 2.800 y 3000 euros, no estaban a la vista y no se observaron signos de que se hubiera forzado la puerta de entrada al domicilio.

Las gestiones de la Policía llevaron a la localización y detención de la mujer, que tras declarar en dependencias policiales fue puesta en libertad a la espera de que la autoridad judicial la requiera.