El alcalde de Torrelavega, el 'popular' Ildefonso Calderón, se ha mostrado "totalmente en desacuerdo" con la decisión judicial de archivar la denuncia que presentó por el escrache que sufrió el pasado 18 de abril en su domicilio y ha advertido que "no va a consentir" que se atemorice a su familia o a sus vecinos por lo que seguirá denunciando "cualquier tipo de actitudes de este calibre".

Así lo ha asegurado el regidor municipal en sendas entrevistas realizadas este jueves en Onda Cero y la Cope, en las que indicó que aunque respeta la decisión judicial, está "en total desacuerdo" porque está "totalmente en contra de que se acose a las familias, y a los hogares de cualquier político o de cualquier ciudadano o de cualquier juez".

En las entrevistas, recogidas por Europa Press, Calderón ha señalado que aunque la sentencia dice que "hay que aguantar", él tiene "las ideas muy claras", y no comparte ninguno de los argumentos del auto de sobreseimiento de la denuncia.

Señaló al respecto que "la libertad y la democracia" lo que implica es "el respeto a las personas y el respeto a las ideas y a las opiniones", y subrayó que, sobre todo, hay un ámbito que para él es "tremendamente importante" y hasta "sagrado", que es el ámbito de la familia, "el de las personas que viven con uno" y que "no tienen ninguna servidumbre política" y no tienen "por qué aguantar".

El alcalde explicó que aunque cuando se produjo el escrache, él se encontraba fuera de casa, sabe que "sí hubo temor por parte de su familia, que no salió" del domicilio, y también por parte de los vecinos que así se lo han manifestado.

Si bien reconoce que no hubo ningún insulto hacia su familia o hacia su persona, sí considera que se atemorizó a sus familiares y a los vecinos, algo que "no va a consentir", por lo que cualquier acción de este tipo la seguirá denunciando.

"Creo que estamos llegando a un momento en que lo que importa es defender la familia, a los menores, los hogares de cualquier persona y yo no voy a pasar por esto", dijo Calderón.

"El juez tendrá su opinión y yo tengo la mía", añadió el alcalde de Torrelavega, quien también dejó patente que lo que hubo fue "un acoso claro por parte de un piquete", porque bloqueó la entrada a su casa donde en ese momento estaban su esposa y su hija pequeña, "y profirieron gritos".

Al respecto del Auto judicial, Calderón señaló que cuando se enteró del escrache, decidió denunciarlo y ponerlo en conocimiento del juez "para ver qué opinión le merecía". "Y la opinión ha sido el sobreseimiento de la denuncia y que tenemos poco más o menos que aguantar de todo por ser cargos públicos, y que la intimidad queda muy limitada", apuntó.

Postura paradójica

Calderón, quien señaló que los autores del escrache eran miembros de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca, considera "paradójico", el hecho de hayan llevado a cabo esa acción en Torrelavega, donde el equipo de gobierno del PP ha puesto en marcha una oficina de mediación hipotecaria "hasta el extremo de que se ha evitado el desahucio a 31 familias y hemos atendido a más de cien casos", dijo Calderón, quien también recordó que se ha puesto en funcionamiento una bolsa de alquiler social.

Tras asegurar que incluso municipios de España "con regidores totalmente opuestos a la política del PP" les han llamado para informarse sobre la puesta en marcha de esas medidas, Calderón opinó que el que "te hagan esto" cuando han sido "pioneros" en España en tomar medidas para evitar desahucios "indica que no miden bien la situación".

El alcalde aclaró no obstante que esto "no le importa", porque como político acepta que tiene "una serie de servidumbres", y que en cualquier acto público al que acuda "cualquier ciudadano puede protestar".

Pero lo que "no acepta ni aceptará nunca" es que quienes no tienen "ninguna servidumbre política" que "son las familias, los niños pequeños o menores de edad", tengan que sufrir situaciones así, y reiteró que "cada vez que se produzca un acto así" lo va a denunciar.