Los delitos contra el patrimonio en La Rioja aumentaron en 2011 un 7,9 por ciento respecto al año anterior. Destacan los robos en casas habitadas que pasaron de 37 a 40 y los robos con violencia que aumentaron desde los 268 en 2010 a los 288.

Estos datos han sido presentados esta mañana ante la Comisión de Justicia, Juventud y Deporte del Parlamento de La Rioja por el fiscal superior de La Rioja, Enrique Stern Briones, según recoge la Memoria de la Fiscalía de la Comunidad Autónoma para el año 2011.

El fiscal ha explicado que dentro de los incrementos producidos en el número de delitos, se trata de un aumento medio cercano al diez por ciento, la situación podría considerarse de "estabilidad" y en consecuencia, que "nos movemos en un número exiguo de modificación delictiva".

Uno de los datos destacados, ha apuntado el fiscal, es el incremento del 34 por ciento en concursos en el Juzgado Mercantil, "síntoma de una crisis económica que La Rioja pasó muy bien en 2010 y que en 2011 ha sufrido ese incremento, con toda seguridad, consecuencia de la crisis".

Relaciones familiares y nuevas tecnologías

La Fiscalía ha detectado también una subida de los delitos en las relaciones familiares, "tanto en impago de pensiones como en agresiones de hijos a padres o abuelos", las que ha indicado que "desgracidamente siguen una senda con tendencia ascendente aunque no den picos grandes de criminalidad, pero que sí tienen un ascenso progresivo".

En lo referente a violaciones, el delito más grave dentro de la libertad sexual, se ha pasado de ocho violaciones en 2010 a siete en 2011. Asimismo, en materia de violencia de género se produjeron 393 juicios rápidos y 67 diligencias previas.

Por último, ha resaltado Stern, se ha dado un aumento en los delitos relacionados con las nuevas tecnologías, "ya no nos quedamos con la duplicación de las tarjetas de crédito sino que tenemos otras formas más sofisticadas de delitos contra la propiedad a través de internet".

"Estos delitos tienen que ver sobre todo con la movilidad de los teléfonos móviles. Se ha detectado otra naturaleza como los delitos contra la libertad o integridad moral debido a la excesiva movilidad que tenemos con los teléfonos, a través de los que se pueden dirigir amenazas, coacciones, calumnias o injurias", ha concluido.