Miembros de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) de Valencia se han concentrado este martes ante una sucursal de Bankia del barrio de Orriols con la intención de "boicotear", pacíficamente, una exposición de "pisos de gente a la que han desahuciado", en palabras de uno de los responsables de esta acción, Arturo Peiró.

En declaraciones a los periodistas, Peiró ha criticado que los inmuebles expuestos "los ha requetepagado ya con los intereses abusivos que les ponen, usureros, gente que está en la calle y a la que aún le queda deuda". Denuncia, en este sentido, que las entidades financieras "quieran revender de oferta, a 18.000 o 30.000 euros, pisos por los que metieron hipotecas de 150.000 o 200.000 euros".

"Les quitan el piso, mantienen la deuda y el piso lo revenden, de modo que con el precio que han pagado, tienes cuatro pisos", subraya Peiró, quien recalca que con esta protesta pretenden que "nadie compre los pisos de gente que está en la calle, que es de vergüenza".

Uno de los portavoces de PAH Valencia, José Luis González, ha indicado que en esta sucursal se exponían inmuebles "fundamentalmente de esta zona, aunque también está abierta a otros pisos de la Comunitat Valenciana", y reprueba que "cuando una persona no puede pagar un piso, el banco se quede con el dinero que se ha pagado, con el piso y después se ponga a hacer negocio para revenderlo".

Al respecto, mantiene que "los pisos han de ser de aquellas personas que están viviendo en ellos y de aquellas familias que lo necesitan", por lo que reclaman que "se paralicen los desahucios y que nadie haga negocio con las viviendas de estas familias".

Dos representantes de la PAH han sido recibidos por directivos de la sucursal, a quienes han pedido que "no vendan esos pisos a bajo precio cuando hay gente que aún es expulsada de sus casas" y que trasladen "a la dirección de Bankia que abra una vía de negociación" para gente que "está sufriendo el acoso de las entidades". También les han explicado la problemática de una clienta de esa oficina.

Apelan a la valentía de los directores "de barrio"

Al término del encuentro, González ha hecho un llamamiento a los "directores de oficinas de pueblo y de barrio" a que "sean valientes y sepan atender con diligencia y respeto a las personas afectadas de sus barrios" y, a continuación, ha mantenido reuniones similares con representantes de oficinas de CatalunyaCaixa y de Kutxa. A esta última, también le han pedido que "abra una vía de comunicación".

A preguntas de los periodistas, ha precisado que a raíz de la interlocución con las entidades financieras que reclamaron en la acción 'Acampa la banca', "hay bancos y cajas de ahorros que están dispuestas a hablar y de hecho, están hablando con la PAH, como la Caixa, CatalunyaCaixa o SabadellCAM, pero otras muchas entidades que no han abierto esa vía de negociación, como Bankia o Kutxa".

Desde la PAH reprochan a estas entidades que "continúan tirando a gente a la calle y no dando daciones en pago con carácter retroactivo ni alquileres sociales a toda la gente que lo necesita" y, al Congreso de los Diputados, que "está de espaldas a la ciudadanía porque las medidas planteadas hasta ahora no resuelven el problema". "Es el momento de que se ponga a su lado, está en sus manos y ha de dar una solución definitiva a los desahucios", señalan.

Exigen, en este sentido, la puesta en marcha de las tres medidas "avaladas por la Iniciativa Legislativa Popular (ILP) con más de 1.400.000 firmas: paralizar todo desahucio, la dación en pago con carácter retroactivo y el alquiler social", al considerar que "no tiene sentido que esta sociedad en manos de los bancos acumule centenares de viviendas y que haya gente en la calle", con 38.976 familias "expulsadas de sus casas" en 2012 a nivel estatal y 7.018 en la misma situación en el caso de la Comunitat Valenciana.

"calificarlos como nazismo es desconocer la historia"

En cuanto a las declaraciones en las que la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, calificó de "nazismo puro" los escraches sufridos por diversos miembros de su partido, José Luis González las ha tildado de "falacia" y ha defendido que "calificar esas actuaciones como nazismo es desconocer la historia".

Además, ha destacado el "descrédito que están asumiendo las personas que ponen adjetivos que no se corresponden" a estas acciones y ha recalcado que los escraches llevados a cabo en la Comunitat "han sido pacíficos, tranquilos, como pueden atestiguar cantidad de familias y de comercios alrededor de las viviendas de los diputados".

Sobre las sanciones impuestas, ha indicado que en esta autonomía sólo tuvieron "problemas en uno", el realizado ante el domicilio de Esteban González Pons, y que permanecen "a la espera de recibir la correspondiente denuncia" que interpuso en "una comisaría de Madrid". En ese caso, la PAH planteará un "acto de conciliación" dada su intención "de que se hable no de la violencia de los escraches, que es inexistente, sino de la violencia institucional que se ejerce contra las familias de los trabajadores que se quedan en paro".