La Fiscalía del Principado de Asturias solicita penas que suman ocho años y ocho meses de prisión y el pago de multas por 360 euros para J.F.M.Á, de 45 años, acusado de entrar en una casa de Castiello (Llanera) con la cabeza cubierta con un pasamontañas y robar dinero y diversos efectos, tras atar al matrimonio propietario de la vivienda y exhibir una pistola y una navaja.

La vista oral está señalada para este martes en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Asturias, con sede en Oviedo, a las 11.00 horas.

Según el escrito del Fiscal, el acusado junto con otra persona que no ha sido identificada, sobre las seis y media de la tarde del 9 de noviembre de 2011, con la cabeza cubierta con un pasamontañas para impedir su identificación, se dirigió a una casa de Castiello, en las proximidades de Lugo de Llanera, donde residían un matrimonio de 79 y 75 años y entraron en la vivienda, cuya puerta principal estaba abierta, sorprendiendo a la pareja en la cocina.

Tras decirles que se trataba de un robo les exigieron la entrega de todo el dinero que hubiera en la casa, exhibiendo para intimidar al matrimonio lo que parecía ser un arma de fuego y un palo.

El hombre se negó inicialmente a entregarles dinero y comenzó a forcejear con uno de los autores, llegando a alzar ligeramente su pasamontañas; sin embargo, recibió un puñetazo y fue reducido. Seguidamente, le sentaron en una silla, a la que le ataron con los brazos atrás con una cinta aislante, y le amordazaron también con ella.

Acto seguido, el acusado y su acompañante se dirigieron a la mujer, exigiéndole que les entregara el dinero, para lo que sacaron una navaja de unos 15 centímetros, que colocaron al cuello de su marido. Ante esa situación, la mujer les facilitó las carteras de ambos.

Los acusados cortaron el cable del teléfono, registraron las carteras y la vivienda y se apoderaron de unos 700 euros en metálico, una tarjeta para repostar gasóleo, otra de crédito, cuyo número de clave exigieron a las víctimas, dos teléfonos móviles y un video-reproductor. A continuación, ataron con la cinta a la mujer, con los brazos atrás, rodeándole las muñecas y colocándole un trozo de tela a la altura del pecho; después cogieron las llaves del vehículo propiedad de las víctimas, con el que abandonaron el lugar, llevándose el botín.

Tras la huída de los acusados, los esposos, con gran esfuerzo y tras un tiempo no precisado, lograron soltarse el uno al otro cortando las cintas con la boca.

Como consecuencia de los hechos, ambos resultaron con varias lesiones e invirtieron 10 y 8 días, respectivamente, en su curación.

De todos los efectos sustraídos solo se recuperó el vehículo, aunque con diversos desperfectos materiales, que los perjudicados no reclaman.

El acusado posee antecedentes penales no computables a efectos de reincidencia, ya que fue condenado en marzo de 2011 por un delito contra la seguridad vial. Presenta adicción a heroína y cocaína, lo que merma apreciablemente sus facultades cognitivas y volitivas en los períodos en los que el consumo es importante, como parecía suceder en el momento de los hechos.

La Fiscalía considera que los hechos son constitutivos de un delito de robo con violencia, un delito de detención ilegal y dos faltas de lesiones. Concurre la agravante de disfraz y la atenuante de grave adicción a los estupefacientes.