El líder del centroizquierda italiano y secretario general del Partido Demócrata (PD), Pier Luigi Bersani, ha reiterado su rechazo a un Gobierno de unidad nacional, pese a que entre sus correligionarios son cada vez más los que abren la puerta a un diálogo con el partido de Silvio Berlusconi.

En una carta al diario La Repubblica publicada este lunes, Bersani asegura que Italia necesita un Gobierno que pueda actuar "de forma unívoca, que corra riesgos y que pueda percibirse en la dimensión real, en la vida cotidiana de los ciudadanos".

"No un Gobierno que viva de equilibrismos y de precarias composiciones de fuerzas contrapuestas", agrega.

El líder del PD se refiere, además, a la posibilidad de dar un paso atrás, tras las críticas que le acusan de inmovilismo en medio de la parálisis política italiana, después de los ajustados resultados de las elecciones generales de febrero que no han permitido, hasta el momento, la investidura de un nuevo Ejecutivo.

"Repito lo que siempre he dicho. Si soy útil, aquí estoy. No pretendo ser un estorbo", asevera Bersani, que expresa su disponibilidad a apoyar otras propuestas a favor del cambio si existen.

En los últimos días, Bersani ha visto aumentar la presión dentro de su formación para que acceda a dialogar con el ex primer ministro Silvio Berlusconi y salir así del bloqueo político que vive Italia.

Dario Franceschini, líder del partido hasta la llegada de Bersani a la Secretaría General, abrió la veda dentro del núcleo duro de la formación, mientras que el actual portavoz del PD en la Cámara Baja, Roberto Speranza, apuntaló esa postura y aseguró que Berlusconi está "legitimado" por los votos que su centroderecha ha obtenido para poder dialogar para la formación de un Gobierno.

La cuestión del diálogo no solo se centra en la formación del Gobierno, sino también en la elección del nuevo presidente de la República, pues está previsto que pueda iniciarse la votación para la elección del próximo jefe del Estado el próximo día 18.

Se espera que Bersani y Berlusconi se reúnan esta semana en Roma para abordar nombres de consenso, pero en el PD cada vez son más las voces que apuestan por que su secretario general acceda también a abordar el asunto de la formación del Ejecutivo, aplazada a la espera de conocer el resultado del trabajo de las dos comisiones de sabios.