La diputada de Geroa Bai Uxue Barkos pidió en el Congreso una ayuda de 150.000 euros para una empresa de la que es accionista, Euskalerria Irratia, cuando la legislación vigente impide a los cargos públicos participar en estos procesos cuando existe algún "interés personal".

Así lo destaca este lunes Diario de Navarra en una información según la cual la diputada nacionalista no logró la subvención para la radio, de la que es propietaria de 200 acciones que adquirió en mayo de 2012, y que emite en euskera desde la capital navarra.

Barkos no informó al Congreso de la compra de estas acciones y no las hizo constar en su declaración de bienes, lo que es obligatorio para todos los diputados, por lo que, señala el diario, podría haber vulnerado la ley que regula el comportamiento de los cargos públicos.

La ayuda la solicitó la diputada en el Congreso durante una sesión celebrada el 23 de noviembre de 2012 en la que se debatían distintas enmiendas para los Presupuestos Generales.

Uxue Barcos ha reaccionado a la noticia asegurando este lunes que no sabía que tenía acciones en una emisora. La diputada ha afirmado que hizo "una aportación a fondo perdido de 1.200 euros" a la sociedad editora de Euskalerria Irratia y ha asegurado que desconocía hasta este lunes que esa aportación había sido convertida en 200 acciones.

Barkos ha afirmado que "jamás" ha recogido esas acciones. "Han quedado en manos de la empresa, porque esto no es una inversión de capital, esto es una aportación a fondo perdido", ha añadido.

La diputada también ha dicho que los participantes en Iruñeko Komunikabeak, la sociedad de Euskalerria Irratia, "no tenemos otra intención que hacer una aportación gratuita y desinteresada para un proyecto de comunicación de interés para los euskaltzales de Iruñerria".

Uxue Barkos ha defendido que no tiene "ningún interés personal, ni directo, ni tangible en esta sociedad, no es ninguna inversión, son 1.200 euros a fondo perdido para un proyecto social de los euskaltzales". "Tampoco tengo la condición de administradora, no poseo el control efectivo, y mi participación social es residual o testimonial", ha sostenido.

"No es una sociedad mercantil al uso ya que desde su constitución en 1984 nunca ha repartido dividendos", ha continuado. Y ha agregado: "De las últimas cuentas anuales depositadas en el registro mercantil, la sociedad totaliza unas pérdidas en el último ejercicio que ascienden a más de 21.000 euros".

Por último, Barkos ha considerado que lo ocurrido es "un nuevo episodio de acoso" a Geroa Bai y a ella misma. "Se comenzó acusándome de utilizar circunstancias personales, como una enfermedad, en beneficio electoral y los tribunales me dieron la razón. Ha continuado con las insidias de UPN sobre una supuesta ocultación de patrimonio, algo que está denunciado ante los tribunales y admitido a trámite. Y ahora llegamos a este nuevo capítulo", ha indicado.