El alcalde de Nueva York, Michael Bloomberg, prometió investigar a fondo el suceso en que cinco policías acribillaron con 50 disparos a tres negros desarmados, lo que ha revivido el espectro de la tensión racial en la ciudad.

En un intento de atajar cualquier posible brote de violencia, Bloomberg y los altos cargos del Departamento de Policía se han mantenido en estrecho contacto durante el fin de semana y también ayer con líderes religiosos y civiles de la comunidad afroamericana, a quienes les han garantizado una investigación amplia y justa.

"No sabemos aún exactamente lo que pasó", aseguró Bloomberg, reconociendo que para él este suceso, ocurrido el sábado, resultaba "incomprensible", y llamó a no hacer juicios apresurados sobre las circunstancias de esta tragedia.

Sean Bell, de 23 años, quien iba a casarse ese mismo día con la madre de sus dos hijos, resultó muerto en la madrugada del sábado a la salida de un club de striptease, en su despedida de soltero, en el barrio de Queens.

Otros dos amigos, Joseph Guzman y Trent Benefield, resultaron heridos de gravedad al ser tiroteado el auto en que acompañaban a Bell: el primero recibió once impactos de bala; el segundo, tres, según la prensa local.

El trágico suceso ha reavivado el recuerdo de lo ocurrido en febrero de 1999, cuando cuatro policías blancos efectuaron 41 disparos contra el inmigrante africano Amadou Diallo, que también estaba desarmado.

La muerte de Diallo, que recibió 19 impactos de bala, provocó una fuerte tensión entre el ayuntamiento que dirigía entonces Rudolph Giuliani, y las minorías, que acusaron a la policía de brutalidad y de excederse en el uso de la fuerza en ese y otros incidentes.

Prioridad

Una de las prioridades de Bloomberg al llegar a la alcaldía, en 2002, fue precisamente restablecer el diálogo con las comunidades afroamericana y latina, y restablecer la confianza de los ciudadanos en el Departamento de Policía, a cuyo frente puso a un veterano y reconocido experto en seguridad como Raymond Kelly.

Algunos líderes afroamericanos han pedido ahora la dimisión de Kelly, pero Bloomberg dejó bien claro que no piensa prescindir de uno de sus principales apoyos en la gestión municipal.

"Tengo completa confianza en nuestro jefe de policía y seguirá siendo el jefe durante el resto de mi mandato", aseguró el alcalde, y subrayó los avances que se han logrado en hacer un departamento de policía más diverso y mejor preparado para los retos que afronta.

A pesar del claro respaldo a la gestión de Kelly, Bloomberg reconoció que para él es "inaceptable e inexplicable" que las fuerzas de orden realizasen 50 disparos.

Un grupo de agentes encubiertos y detectives vigilaba el interior y el exterior del club Kalua, debido a sospechas de prostitución, tráfico de drogas, y presencia de armas en el local.

Según las primeras explicaciones policiales, un detective que estaba dentro sospechó que podía ocurrir un altercado violento entre los clientes, que discutieron a la salida, y al parecer uno de los acompañantes de la víctima mencionó que disponía de un arma.

De acuerdo con esa versión, los agentes siguieron a Bell y a sus amigos, quienes abordaron un automóvil estacionado cerca, y cuando un detective armado se aproximó, lo embistieron, al igual que a otro coche camuflado con más agentes, lo que desató el tiroteo.

Ese relato ha sido desmentido por un testigo presencial, Trini Wright, una bailarina del club que declaró al diario 'Daily News' que la policía comenzó a disparar sin aviso previo.

Bloomberg señaló que es comprensible que la comunidad afroamericana esté "indignada" por este suceso y afirmó que él mismo se siente, "por decirlo con suavidad, profundamente afectado", pero pidió que no se saquen conclusiones hasta que concluya la investigación de la Fiscalía de Queens.

No obstante, afirmó, "debemos reconocer que con demasiada frecuencia la gente es interpelada (por la policía) y creen que es así en base a su etnia, lo que es inaceptable", dijo Bloomberg, y añadió que se forma a los agentes para que eso no suceda y actúen de forma correcta.

"Me parece que se usó la fuerza en exceso, pero eso corresponde al fiscal determinarlo", agregó.