«Un discapacitado puede entregarse igual al trabajo que otros»

«Nunca imaginé que podría ser funcionaria, pero ahora sé que los sueños se cumplen».
Belén Rodríguez.
Belén Rodríguez.
Belén Rodríguez.
Así describe María Belén Rodríguez el tiovivo de sensaciones en el que se ha convertido su vida desde que aprobó las primeras oposiciones del Ayuntamiento de la capital para discapacitados intelectuales. A principios de año se ofertarán ocho plazas y otras ocho el siguiente.

¿Qué supone para usted haber aprobado estas oposiciones?

Para mí era todo un reto. Pensaba que no las iba a sacar y, fíjate, he quedado la primera de la lista.

¿Le ha costado mucho esfuerzo?

La verdad es que sí, pero lo que no quería era quedarme en casa. Mi obsesión era trabajar y conseguir demostrar que un discapacitado se entrega igual en su empleo que cualquier persona.

Y lo ha logrado...

Todavía no me lo creo. Han sido muchas noches sin dormir, sobre todo los últimos cuatro meses, pero ha merecido la pena.

¿No pensó nunca en tirar la toalla?

No, he estudiado mucho durante dos años y el apoyo de mi familia y mis amigos ha sido fundamental.

¿Qué tipo de preparación ha necesitado?

He estudiado en una academia, aunque también me ha ayudado el tiempo que he estado trabajando en el Ayuntamiento.

¿Cuáles son ahora sus planes de futuro?

Seguir trabajando en la Concejalía de Educación. Asimismo, me gustaría independizarme, aunque dependerá de si logro desenvolverme sola en casa.

Bio

Belén tiene 26 años. Estudió FPO y ha trabajado durante tres  en el Ayuntamiento. Ahora lo hace como funcionaria.

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