El presidente de la Asociación Española de Banca (AEB), Miguel Martín, ha afirmado este jueves que en España "estamos blindados" ante un posible contagio de la situación en Chipre y ha añadido que los problemas del sector "no se resolverán castigando a los depósitos".

El presidente de la AEB ha respondido así durante la presentación de los resultados anuales del sector, ante preguntas sobre la posibilidad de que España se vea contagiada por la situación en Chipre, a quien el Eurogrupo exigió imponer un gravamen único a los depósitos bancarios como requisito para recibir el rescate financiero.

Miguel Martín ha asegurado que España es "uno de los pocos países donde es perfectamente imposible que se produzca este contagio", ya que cuenta con el Mou - memorándum de entendimiento- firmado con la troika (Comisión Europea, Fondo Monetario Internacional y Banco Central Europeo), que establece las condiciones del rescate europeo a la banca.

En este sentido ha señalado: "Ahí está clarísimo cómo deben resolverse nuestros problemas bancarios y no se resuelven castigando a los depósitos", aunque sí penalizando a los tenedores de deuda subordinada e híbridos. "Aunque se produjese una catástrofe tenemos una estrategia firmada y eso se va a cumplir", ha asegurado.

Martín ha considerado que, si bien existe la posibilidad de contagio en Europa -aunque no para España-, el caso de Chipre es único y no sienta un precedente para gravar los depósitos de los ahorradores en caso de que fuesen necesarios futuros rescates, tal y como ha afirmado el Consejo Europeo.

No obstante, el presidente de la AEB ha considerado que la decisión del Eurogrupo "rompe dos líneas rojas muy importantes", la primera de ellas, el hecho de que los depósitos en euros de todos los bancos europeos deben tener el mismo tratamiento. Esto, ha afirmado, "pone en evidencia la necesidad de avanzar hacia la supervisión bancaria única".

La segunda línea roja, ha dicho Martín, es la "preferencia absoluta que debe tener la protección de los depósitos en una crisis". En España "nadie ha perdido un solo euro ni una sola peseta en una crisis bancaria", ha insistido.