Un caricaturista cubano del diario estadounidense El Nuevo Herald, vestido de militar y armado, se ha entregado después de permanecer desde esta mañana atrincherado en la oficina del director de ese diario de Miami, Humberto Castelló.

Según el rotativo, el caricaturista José Varela entró a la redacción y tras discutir con un responsable del departamento de fotografía se dirigió al despacho de Castelló, que estaba vacío, sacó un arma y comenzó a gritar que él era el nuevo director.

Edificio evacuado

Algunas versiones apuntan a que el arma que porta el dibujante era una subametralladora, mientras que una fuente del rotativo dijo que se trataba de un cuchillo.

"Estás hablando con el nuevo director del periódico, y estoy aquí para desenmascarar los verdaderos conflictos del periódico. Aquí se burlan de los exiliados, hay problemas con el pago", dijo Varela, en una conversación telefónica con un colega, según la versión digital del periódico.

Se acaba de divorciar

Según la bitácora en Internet de un reportero del diario, Rui Ferreira, la semana pasada Varela estuvo en la redacción y dijo que había comprado una escopeta de "cañones recortados y una subametralladora".

Según el periodista, Varela dijo que lo hizo porque "se sentía inseguro en el área de Júpiter (una localidad al norte de Miami), adonde se había mudado tras su divorcio".

Varela tiene dos hijos y se acababa de divorciar, según datos del diario.