El ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, defiende la decisión del Gobierno de imponer un tipo "muy moderado" al impuesto estatal que grava a las entidades bancarias por sus depósitos para compensar a las comunidades que vieron anulado su impuesto autonómico en este sentido, como Andalucía, y ha insistido en diferenciar este tributo de uno sobre los ahorradores, como el que se trata de imponer en Chipre.

Durante la sesión de control este miércoles al Gobierno en el Congreso, el responsable de Hacienda ha recalcado que el impuesto estatal no es "recaudatorio" sino "para implantar orden en el mercado bancario español a raíz de la demanda que hizo la Comisión Europea" y ha hecho hincapié en que en España "no existe, ni ha existido, ni va a existir un impuesto sobre los depositantes, sobre los ahorradores", como el chipriota.

"No hay impuesto sobre depositantes, ni lo va a haber, sino que es otro impuesto sobre entidades bancarias, que es modesto y no recaudatorio, y sobre el que Gobierno prevé introducir un tipo muy moderado para compensar a las comunidades autónomas", ha insistido.

Como hiciera este martes en el Senado, Montoro ha mantenido que el Gobierno va a imponer un tipo "muy moderado" al impuesto a las entidades en función de su volumen de depósitos bancarios y que servirá para compensar a las tres regiones que tenían un impuesto autonómico —Andalucía, Canarias y Extremadura— y que lo vieron anulado. Sin embargo, no ha detallado de cuánto será el tipo que se imponga.

A la vista de la previsión de resarcir a las tres comunidades, el ministro ha rechazado que pueda criticarse el impuesto estatal por mermar la capacidad recaudatoria de las regiones e ir en detrimento de la oferta de servicios públicos y ha pedido que se "normalice el debate" y no se traslade los ciudadanos una información errónea.

Por su parte, el diputado del PSOE Javier Barrero ha acusado al Gobierno de hacer políticas "evitando" las "alternativas" de las comunidades autónomas para cubrir sus necesidades y ha señalado que la "austeridad suicida" estatal y su "control obsesivo" a las regiones provocan un "malestar extraordinario" entre los españoles.

De ese modo, el diputado ha trasladado que la gente considera "obsceno" que el Gobierno hace unos meses elimine, a través de un "artilugio legal", los impuestos sobre depósitos bancarios de algunas comunidades autónomas, destinados a obtener ingresos para cubrir servicios, "mientras ayuda a la banca con 34.042 millones de euros que son nuestros y que superan la suma del déficit de las comunidades autónomas, las corporaciones locales y la Seguridad Social".

En la misma línea, ha dicho que el Gobierno tiene actitudes que "parecen no decentes", como esta sobre el impuesto a la banca pero también como el tercer recurso a la subasta de medicamentos andaluza. "Cambie su política porque es desprecio a las competencias de las comunidades autónomas para tener más ingresos", ha concluido el socialista.