La Federación Provincial de Empresarios de la Construcción (Fepeco), tras confirmarse hace apenas unos días la paralización de las obras del anillo insular, ha querido denunciar el incumplimiento de las "continuas promesas" de inversión en infraestructuras previstas para la isla de Tenerife.

En un comunicado de prensa, Fepeco ha afirmado que la paralización y los retrasos de proyectos como el anillo insular, el puerto de Granadilla, la conexión Norte-Sur o la segunda pista del aeropuerto Reina Sofía son consecuencia de la "dejadez" de algunos políticos de Tenerife, que "siempre han mirado más hacia otras islas".

La patronal de la construcción también ha criticado el "embrollo" en el que está el Plan General de Ordenación (PGO) de Santa Cruz, que es "continuamente bloqueado" por los dirigentes municipales, que son "incapaces" de dotar a la capital de un instrumento "imprescindible" para su desarrollo y crecimiento.

Para Fepeco, "parece una maniobra de entorpecimiento muy bien estudiada y ejecutada por los propios que lo tienen que aprobar, para que pase el tiempo y se proceda a su nulidad y así dejar sin presente y futuro a Santa Cruz".

Los empresarios de la construcción se han mostrado "indignados" al ver que las obras se terminan con "total celeridad y normalidad" en las demás islas y en Tenerife, en cambio, "todo son pegas, trabas y manifestaciones para paralizar cualquier iniciativa inversora y creadora de puestos de trabajo". "El no a todo parece que sólo nace, vive y se reproduce en Tenerife", recalca Fepeco, que espera conocer algún día las razones de esta situación.

Desequilibrio inversor

La Federación ha querido recordar que lleva más de veinte años denunciando este "desequilibrio inversor", planteando "reiteradamente" sus demandas a los distintos presidentes autonómicos, a los consejeros de Obras Públicas y a las sucesivas autoridades insulares y locales, cuya respuesta "siempre fue que no había motivo de preocupación y que las obras se ejecutarían sin problemas".

Por tanto, la paralización de proyectos como el anillo insular o el puerto de Granadilla, según Fepeco, responde a que o bien "se negocio mal" o "no se ha sabido defender las necesidades básicas en inversiones dotacionales".

Desde la Federación se recuerda, además, cómo alertó "una y otra vez" a los políticos de la posibilidad de que algún día no hubiera financiación para los proyectos de obras públicas de Tenerife, provocando su retraso y paralización, a lo que se contestó que "era imposible".

Según Fepeco, "los acontecimientos han demostrado que los temores eran fundados", quizás porque "la mayoría de los políticos de Tenerife se han equivocado adrede o por ineptitud".

La patronal de la construcción ve con "rabia contenida" que Tenerife "adolece" de políticos "valientes" que defiendan lo que "en justicia" le corresponde a la isla. "En cambio, se vuelcan de manera injustificada con los intereses de otras islas y siempre en perjuicio de Tenerife", añade.

Ha hecho hincapié, además, en que desde 2010 los recortes presupuestarios se han centrado en las infraestructuras, provocando que entre 2008 y 2012 se hayan perdido unas 160.000 empresas en el sector, un 66% menos de afiliados a la Seguridad Social desde 2007 y un 30% menos de autónomos.

Fepeco considera estas cifras "escandalosas" y demanda medidas de crecimiento a través de la inversión pública en infraestructuras, recortando gastos en actividades y sectores improductivos de las que diferentes administraciones "saben mucho". Igualmente, apunta que por cada millón de euros invertido en la construcción se crean 18 puestos de trabajo directos, con un retorno fiscal del 56%.