La Guardia Civil, dentro de una operación especial llevada a cabo el pasado miércoles a nivel nacional, ha inspeccionado cerca de 800 centros de gestión de residuos sólidos en diversas ciudades españolas, entre ellas, Málaga y Granada, y en total ha recuperado más de 3500 kilos de diferentes metales presumiblemente procedentes de robos.

Según ha informado el Ministerio del Interior, entre los metales más robados destaca el cobre debido al valor que alcanza en el mercado ilegal este tipo de metales. Además, han sido detenidas diez personas e imputadas más de 50 en todo el territorio nacional.

En concreto, en esta operación, que se enmarca dentro del Plan Nacional establecido por la Guardia Civil para la lucha contra el robo de metales, se ha detenido a ocho personas en Málaga, donde se han incautado 157 kilos de cobre, 934 electrodomésticos con un volumen de 600 kilos de cobre, otros tantos de acero y 240 de aluminio. Además, se han intervenido tres escopetas de caza, dos silenciadores para armas largas y dos kilos de marihuana, entre diverso material procedente de los distintos delitos.

Igualmente, en la provincia de Granada, la Guardia Civil ha puesto a disposición judicial en calidad de imputados no detenidos a dos personas de Maracena y Fuente Vaqueros, propietarios respectivamente de una chatarrería y de un establecimiento comercial, como presuntos autores de un delito de receptación, ya que durante la inspección en ambos negocios los agentes descubrieron material procedente de robo.

Así, en la referida chatarrería la Guardia Civil descubrió varias bombas de riego, las pinzas de una palanca de tractor, un rotavator y 50 piezas de material de riego que habían sido supuestamente robadas en un cortijo de Láchar el pasado día 4 de marzo, mientras que en el establecimiento comercial la Guardia Civil descubrió varios rollos y mangueras de cobre valorados en más de 4.000 euros que presuntamente proceden de dos robos perpetrados los pasados meses de enero y febrero en una nave de material eléctrico de Íllora.

Además, la Guardia Civil ha inspeccionado ocho chatarrerías en la provincia de Granada y ha denunciado 14 infracciones.

En el conjunto de la operación han participado más de 5.000 agentes de toda España. Algunos de los centros inspeccionados contaban con graves deficiencias, entre las que destaca la no grabación de los movimientos de metales en el aplicativo telemático que comparte la Guardia Civil con estos centros.

La Guardia Civil mantiene operativo desde el año 2006 el 'Plan Nacional para la lucha contra el robo de metales' con el fin de hacer frente al incremento de los robos detectado desde entonces y que está fuertemente vinculado a la evolución de la demanda y el incremento del precio del cobre en el mercado internacional.

Este Plan Nacional contempla una serie de acciones operativas específicas con los objetivos de prevenir los robos de cobre y evitar que el material robado llegue al mercado, a través de una actuación sobre todos los canales de receptación, transformación y transporte internacional.

En estos operativos intervienen tanto las unidades de seguridad ciudadana como las de investigación. En ocasiones se precisa también el apoyo de helicópteros para el control en zonas de difícil acceso de robos de grandes cantidades de metal, tendidos eléctricos, antenas de telefonía o huertos solares, entre otros.

Además de las referidas actuaciones en Málaga y Granada, la Guardia Civil ha llevado a cabo otras en lugares como Pontevedra, donde ha detenido a cuatro jóvenes por su presunta implicación en el robo de 2.000 metros de cable de cobre propiedad de Telefónica.

Asimismo, ha arrestado en Avilés (Asturias) a 34 personas e imputado a otras 16 por el robo de 145 toneladas de escoria de arrabio, y a dos personas más por la receptación de ese metal.