La directora xeral de Comercio, Sol Vázquez Abeal, ha rehusado "entrar a valorar" que NCG Banco haya decidido excluir del arbitraje a los afectados por las preferentes que ha denunciado por supuestas amenazas a empleados porque ha considerado que "trasciende el ámbito administrativo" y porque esta vía es "voluntaria" y requiere que las dos partes decidan acudir a la misma.

Vázquez Abeal ha respondido así a una pregunta planteada por el portavoz del BNG, Francisco Jorquera, en la Comisión 3ª del Parlamento, en la que el nacionalista ha tachado de "impresentable" esta decisión del banco, que ha considerado "un chantaje" para que los afectados abandonen las protestas.

"La Xunta no puede entrar a valorar", ha dicho Vázquez Abeal, que ha apuntado que el Gobierno gallego no quiere "prejuzgar" si los hechos denunciados por el banco son ciertos. El Ejecutivo autonómico, ha insistido "está trabajando por que esos ahorradores restituyan sus derechos".

Desde que se conoció el problema, ha sostenido la directora xeral, la Xunta ha dado su "apoyo" a los afectados y "ha canalizado" sus reclamaciones y colaborado para poner en marcha el arbitraje, pero el Instituto Galego de Consumo "no puede intervenir ni exigir nada a ninguna de las dos partes", puesto que se trata de un acto "voluntario".

"La Xunta no puede entrar a valorar ni respaldar conductas que pueden provocar daños a los bienes o a las personas", ha incidido, ante las críticas de Jorquera, que le ha reprochado que no se centrase en las cuestiones planteadas y ha ironizado con que él preguntó "cómo quedó el Rayo" y Vázquez Abeal contestó "que le gusta mucho en Barça".

"Es reprobable cualquier tentativa de convertir a las víctimas en verdugos", ha protestado el diputado nacionalista, que ha destacado que los denunciados "fueron estafados con un engaño expreso y premeditado", por lo que ha considerado que "es total y absolutamente comprensible su indignación y sentimiento de desamparo". Así, ha criticado que la entidad "asume el papel de víctima" pero "es la responsable de la deficiente comercialización de estos valores".

Intento de chantaje

"Es el colmo del cinismo que la entidad aluda a la defensa de los empleados", ha agregado, porque los trabajadores "fueron la mayoría de las veces presionados para comercializar estos productos y ahora son víctimas de un ERE masivo". "Es simplemente repudiable que las personas objeto de denuncia sean excluidas del arbitraje; sólo se puede calificar como chantaje", ha criticado.

Además, ha defendido que, aunque sean ciertos los hechos denunciados, ello "no exime de su responsabilidad a NCG por la comercialización fraudulenta de preferentes". Jorquera ha señalado que el Gobierno gallego "no está para ser un espectador, está para implicarse en la solución a los problemas de las personas", por lo que le ha pedido que medie para resolver esta situación.