La Junta de Andalucía y las localidades jiennenses de Sabiote y Torreperogil están ultimando los planes de emergencia de dichos municipios para prevenir y actuar ante cualquier situación de emergencia y, especialmente, frente a posibles movimientos sísmicos como los que se vienen registrando en los últimos meses en esta comarca de La Loma.

El consejero de Justicia e Interior, Emilio de Llera, ha mantenido un encuentro con los alcaldes de ambas localidades y técnicos municipales para agilizar la implantación de los planes de emergencia que ya están elaborados y que deben ser aprobados por sus respectivos plenos municipales y, posteriormente, homologados por la Junta de Andalucía antes de su entrada en vigor.

De Llera ha señalado que el riesgo de que haya un gran movimiento sísmico es muy improbable aunque no descartable, según los expertos. Lo importante, asegura el consejero, "es estar preparados, a través de los planes de emergencia que hoy presentamos, para actuar en caso que sea necesario y que la población conozca como debe actuar ante esta situación".

Además, ha destacado en el diseño de los nuevos planes el especial seguimiento de la actividad sísmica coordinado por el Instituto Geográfico Nacional (IGN) y la participación de otros organismos especializados como el Instituto Andaluz de Geofísica.

Las distintas administraciones implicadas se han comprometido a incrementar el número de estaciones sísmicas en el entorno del área de estudio para mejorar la localización de epicentros y su profundidad, así como a emitir, con periodicidad semanal, un informe técnico describiendo la actividad sísmica en base a la información del IGN.

La Delegación del Gobierno de la Junta de Andalucía en Jaén ha colaborado con los técnicos municipales de ambas localidades en la redacción de estos dispositivos que garantizan la seguridad ante eventuales situaciones de emergencia.

El consejero de Justicia e Interior ha asistido también en Torreperogil al desarrollo de un simulacro de emergencias en un centro escolar de este municipio con el objetivo de ensayar una eventual evacuación por un posible terremoto.

En este ensayo han participado 369 alumnos y 29 profesores del colegio público de educación infantil y primaria Pero Xil, que han sido evacuados conforme a un protocolo de emergencias desde sus aulas hasta el patio del colegio. El simulacro ha comenzado con la alerta del sonido del timbre durante diez minutos, que supone el anuncio de la activación del plan de autoprotección.

Posteriormente, los escolares se han refugiado debajo de sus mesas durante el tiempo en el que ha dejado de sonar el timbre. Una vez que la alarma se ha activado de nuevo de forma intermitente, los alumnos han procedido a salir rápidamente de las aulas y dirigirse al patio del centro bajo la supervisión de los docentes responsables de cada planta.

Así, los escolares han salido en fila con un control estricto de todos para garantizar que ninguno de ellos se queda en el interior del edificio. Este colegio, que cuenta ya con un plan de autoprotección, ha realizado ya otros dos simulacros por un eventual incendio y también uno similar por movimientos sísmicos.

El consejero de Justicia e Interior ha subrayado la importancia de este tipo de simulacros para garantizar la seguridad de las personas, así como la necesidad del aprendizaje de las medidas de autoprotección por parte de la ciudadanía y, como en este caso, por los escolares y personal docente.

Planes de emergencia

Los planes de emergencia que se aprobarán próximamente contemplan la acción conjunta y coordinada de todas las administraciones públicas, tanto de forma preventiva como ante catástrofes o episodios de emergencia consumados.

Además, los dispositivos incorporan a la población como elemento activo estableciendo contacto con agentes sociales y sensibilizando a los habitantes para consolidar actitudes que faciliten la gestión de la emergencia.

En el marco de dichas medidas, los planes de emergencia de Sabiote y Torreperogil incluyen la catalogación de los edificios por antigüedad, los riesgos que sus características pueden entrañar ante un eventual movimiento sísmico y la definición de los inmuebles más vulnerables como residencias de ancianos o centros escolares.