El consejero de Universidades, Empresa e Investigación, José Ballesta, presidió hoy la reunión del Consejo de Academias de la Región, donde mostró su satisfacción por ser entidades que trabajan para fomentar e incrementar el patrimonio intelectual de la Región, "un patrimonio que brinda a toda la sociedad", afirmó.

En este sentido, el responsable autonómico resaltó "la gran labor que realizan estas instituciones tan arraigadas en nuestra cultura e historia intelectual, representando y abarcando distintas áreas del saber en las que la Región destaca por el gran talento de nuestros académicos demostrado por décadas de trabajo e investigación, que les ha valido reconocimiento fuera de nuestras fronteras".

Asimismo, Ballesta felicitó al catedrático de Óptica de la Universidad de Murcia, Pablo Artal, que es el primer español que obtiene el reconocimiento como 'Gold Fellow' por la Asociación para la Investigación en Visión y Oftalmología de Estados Unidos, según informaron fuentes del Gobierno regional en un comunicado.

Actualmente, forman parte del Consejo la Real Academia de Legislación y Jurisprudencia de Murcia, la Academia de Ciencias de la Región de Murcia, la Real Academia de Medicina y Cirugía de Murcia, la Real Academia Alfonso X el Sabio de Murcia, la Real Academia de Bellas Artes Santa María de la Arrixaca de Murcia, la Academia de Farmacia Santa María de España de la Región de Murcia y la Academia de Veterinaria, que es la más reciente.

Igualmente, el consejero destacó que "en estos momentos contamos en la Región con un total de 169 académicos de número, distribuidos en las siete academias existentes. Su actividad diaria, ha permitido que el pasado año se celebraran 10 actos de toma de posesión como académicos de número, se impartieran 26 conferencias, y se celebraran cinco jornadas y siete mesas redondas, además de presentaciones de colecciones y de libros".

El titular de Universidades, Empresa e Investigación hizo hincapié en el papel que desempeñan estos organismos, reconocidos también como agentes del Plan de Ciencia, Tecnología e Innovación 2011-2014 por ser también "instituciones al servicio de la sociedad, que preservan el acervo histórico, cultural y científico del pasado, adaptando su quehacer y funciones a la sociedad del conocimiento de hoy. Nuestras academias aportan el trabajo, el compromiso, la dimensión ética de su quehacer, la solidaridad y la crítica desde la reflexión".