El arzobispo de Toledo, Braulio Rodríguez, ha manifestado que el nuevo Papa "tal vez" sea más joven que Benedicto XVI cuando accedió el cargo —79 años—, pero su juventud "no tiene que ser la única razón" para condicionar su elección aunque "en estos momentos está barajándonse".

A preguntas de los medios tras la presentación de una campaña solidaria de la Archidiócesis de Toledo, Rodríguez ha dicho que "es probable que el Papa elegido no tenga muchos años", y ha asegurado que tener 55 años "es ser joven", pero a los 69, por ejemplo, "no se es tan joven, y de esa edad hay muchos cardenales".

"El Papa Juan Pablo II tenía 58 años cuando fue elegido, y con esa edad hoy sería el cardenal casi más joven", ha dicho Rodríguez, que ha aseverado que "una de las razones por las cuales Benedicto XVI dijo que no se encontraba con suficiente fuerza para seguir como sucesor de Pedro es su edad y su vitalidad, porque a los 86 años que va a cumplir en un puesto concreto éste, es difícil".

Para el arzobispo de Toledo, lo que "interesa" es que los cardenales que tienen que elegir decidan quién es el nuevo Papa "según las condiciones que ahora necesita la Iglesia".

Además, ha dicho que en la Iglesia "el vicario de Jesucristo es necesario porque así lo ha querido Jesucristo", pero ahora "hay que dejar que los cardenales vean quién tiene que tener esa responsabilidad". "A nosotros nos toca esperar y ver las cosas en su realidad concreta, es importante que haya un Papa con suficiente fuerza y que pueda ponerse al frente de la Iglesia para resolver problemas", ha agregado.