El aeropuerto romano de Ciampino ha sido reabierto tras comprobar que se trataba de una falsa alarma la llamada de teléfono anónima, que había avisado de la presencia de una bomba a bordo de un avión comercial, informaron fuentes del aeródromo.

Equipos de artificieros inspeccionaron los aviones estacionados en el segundo aeropuerto romano, sin detectar la presencia de ningún artefacto.

Una llamada anónima al cuerpo de bomberos anunció a las 8.55 hora local (7.55 GMT) la presencia de un artefacto explosivo a bordo de un avión comercial en Ciampino.

El aeropuerto fue parcialmente cerrado y algunos vuelos fueron desviados al aeropuerto romano de Fiumicino y otros estuvieron sobrevolando el aeródromo en espera de recibir la autorización para poder aterrizar.