Agentes del Cuerpo Nacional de Policía han detenido a tres jóvenes, N.I de 29 años, MV.D de 20, y ME.U de 19, integrantes de un grupo organizado dedicado a hurtos en comercios.

Las jóvenes fueron localizadas el 26 de febrero cuando se dirigían a su vehículo, estacionado en el parking del Ayuntamiento de Santander, que utilizaban como almacén de los artículos que iban sustrayendo.

Les fueron intervenidas prendas valoradas en 768 euros, entre las dos bolsas que portaban en el momento de la detención, además de lo que ya habían depositado en el maletero del vehículo. Los agentes también se incautaron de unos alicates y seis bolsos preparados para eludir los sistemas de seguridad de los comercios.

Las tres carecían de antecedentes y pasaron a disposición judicial.

El pasado día 26, a las 12.30 horas, el Grupo de la Brigada de Policía Judicial encargado de hurtos en la zona comercial de Santander observó a dos jóvenes que entraban en el parking del Ayuntamiento cargadas con dos bolsas grandes, para a continuación salir con otras bolsas distintas vacías y habiéndose cambiado de ropa.

Los policías comprobaron que antes de salir del estacionamiento habían depositado el contenido de las bolsas en un vehículo allí aparcado y en cuyo interior se encontraba una tercera joven.

En ese momento llegaron las otras dos, con las bolsas llenas otra vez de ropa y complementos, por lo que se procedió a su identificación y cacheo, ocupándoseles los efectos que portaban en las bolsas y los que almacenaban en el maletero del coche, todos pertenecientes al mismo comercio de la calle Lealtad, de los que no pudieron justificar su compra y que posteriormente fueron identificados por el responsable del comercio.

Durante este año se han producido en la ciudad numerosos hurtos de ropa en establecimientos comerciales textiles por parte de grupos formados por hombres y mujeres, mayoritariamente de los países del este, que actúan de forma organizada, apropiándose de las prendas para a continuación abandonar los establecimientos sin ser detectados por los sistemas de seguridad.

En algunos casos los efectos sustraídos se ponen a la venta en el mercado negro, y en otros, por medio de empresas de transporte, se envían a otros países donde se venden.

Los hurtos se producen aproximadamente en una franja horaria comprendida entre las 11.30 y las 14.30 horas y las 18.00 y las 20.00 horas en la zona comercial del centro de Santander.

El "modus operandi" utilizado por estos grupos organizados de delincuentes consiste en desplazarse hasta el centro de la ciudad de cualquier provincia, generalmente en un coche alquilado, que estacionan en un aparcamiento y en el que van depositando los efectos sustraídos a lo largo de la jornada de "trabajo", para a continuación abandonar el lugar, lo que dificulta su localización y detención.