El Pleno del Ayuntamiento de Palma ha aprobado este jueves por unanimidad el acuerdo de adhesión del Consistorio al convenio para la creación de un fondo social de viviendas destinadas a alquiler para afectados por desahucios.

El convenio contempla la creación del fondo social de viviendas destinadas al alquiler que estará constituido por unas 6.000 viviendas aportadas por las entidades financieras y a las que podrán acceder personas que hayan sido desalojadas de su primer casa a partir del 1 de enero de 2008 y que, además, se encuentren en situación especial de vulnerabilidad social.

La portavoz de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH), Ángela Pons, ha opinado que este convenio nacional es insuficiente, puesto que a estas 6.000 viviendas "mañana ya estarán ocupadas", porque solo en Mallorca "existen 8.000 personas que no tienen entrada económica de ningún tipo".

"Las políticas del PP son parches", ha apuntado Pons, que ha dicho que aunque "está muy bien" que pongan estas viviendas a disposición de los desahuciados, ha lamentado que el Gobierno no haya establecido diálogos "con las personas adecuadas", sino que "va adoptando medidas sin un criterio serio".

La portavoz de PAH ha advertido además de que la mayoría de estas viviendas "serán compartidas, no serán para una familia", y de que "no todo el mundo podrá entrar, serán para personas desahuciadas que deberán pagar unos 150 euros más luz".

Pons se ha preguntado cómo lo harán las personas que no tienen ninguna entrada de dinero, "que son la mayoría que atiende la PAH", así como otros que cuentan solo con 425 euros mensuales.

La portavoz de PAH le ha pedido al PP -del que ha dicho que "tiene mayoría y que no está ayudando a los ciudadanos, sino a la banca que ha hundido al país"- que apruebe la dación en pago con efecto retroactivo, "que es totalmente factible".

En opinión de Pons debe establecer la dación en pago para estos ciudadanos "que son los que han pagado todas las barbaridades, como el Palma Arena, el metro que no ha servido para nada y el Palacio de Congresos", y ha advertido de que si dicen que no, "se merecerán que los ciudadanos no paguen impuestos".