El PP despidió a Jesús Sepúlveda el mismo día en el que lo anunció la secretaria general del partido, María Dolores de Cospedal, y acordó con él una indemnización por despido improcedente que ya le ha sido abonada, según el propio partido.

Fuentes del PP han explicado que el pasado 11 de febrero el partido remitió a Sepúlveda -exalcalde de Pozuelo de Alarcón (Madrid) imputado en el 'caso Gürtel' y exmarido de la ministra Ana Mato- una carta de despido, que en este caso es improcedente. También acordó con él la indemnización que, según las mismas fuentes, le correspondía, que ya se le ha pagado.

El PP sale así al paso de la información de la Cadena Ser, según la cual Sepúlveda figura inscrito como "baja voluntaria" el pasado 11 de febrero en el registro de la Tesorería General de la Seguridad Social.

La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, anunció el despido de Sepúlveda el pasado 11 de febrero, en una rueda de prensa en la que explicó que al partido le parecía entonces "oportuno" terminar la relación laboral con él y subrayó que se aplicaría para dicho despido la legislación en vigor.

El despido de Sepúlveda se produjo diez días después de que se conociese un informe de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) con nuevos datos sobre pagos de la red Gürtel a Sepúlveda, entre ellos de hoteles, alquiler de coches y billetes de avión a nombre de Sepúlveda, su exmujer y varios miembros de su familia.

Sepúlveda se reincorporó como trabajador a Génova, la sede popular, después de dimitir como alcalde de Pozuelo tras haber sido imputado, dado que pidió su baja como militante del partido, pero no como trabajador del mismo. El exmarido de Ana Mato no trabajaba físicamente en la calle Génova, sino que lo hacía desde casa y se dedica a realizar informes cuya periodicidad y temática no aclaró el PP.

El vicesecretario de Organización del PP, Carlos Floriano, explicó al saltar la noticia de que Sepúlveda aún trabajaba para el PP que seguía haciéndolo porque "tiene unos derechos y esos derechos están ahí". Según Floriano a Sepúlveda le amparaba el Estatuto de los Trabajadores porque "a los empleados imputados no se les puede despedir legalmente" y si lo hicieran, "podría ir magistratura de trabajo y nos obligarían a readmitirle por despido improcedente".

Tan sólo unos días después, la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, corregía a Floriano y aunciaba que el exalcalde de Pozuelo de Alarcón había sido despedido. "Nos ha parecido oportuna terminar esa relación laboral", subrayó entonces la dirigente popular, quien ha añadió que "rectificar es de sabios".

"Teniendo en cuenta la situación que se ha provocado, este partido tiene que ser consecuente con lo que piensa también que debe ser una conducta ejemplar", dijo, y añadió que les pareció "que teníamos que obrar así. No pasa nada. Rectificar es de sabios y no tengo ningún problema en decirlo". Según anunció entonces, para despedir a Sepúlveda se le iba a "aplicar la legislación vigente".