El International Herald Tribune y el periódico suizo de deportes Goal, afirmaban el sábado que si David Beckham hubiera asistido finalmente a la boda podría haber tenido serios problemas con Capello.

Beckham fue bueno y volvió a España con tiempo para cumplir con sus compromisos. Estuvo en las gradas, triste y melancólico, hablando frecuentemente por el móvil, pero cumplió. Al término del partido celebrado en el Santiago Bernabeu entre el Racing y el Real Madrid, Capello, en rueda de prensa manifestó:

"Había pedido permiso para ir el viernes a Roma y la mañana del sábado estaba en Valdebebas para curarse su rodilla. Fue con permiso del club. Por la tarde le he preguntado si va a correr el domingo y me ha dicho que aún le duele. Si le dimos permiso es porque el doctor me dijo que podía irse tras hacerse sus curas. No ha perdido un sólo minuto ni una hora de tiempo para curarse", aclaró.

Según informaba el viernes la agencia EFE, Beckham tenía previsto acudir el sábado a las 20:00 al Santiago Bernabéu para presencial Real Real Madrid-Racing de Santander.

El hecho de que esté lesionado en una rodilla no impide que haya de seguir entrenando con un fisioterapeuta. El marido de Victoria tenía permiso de Capello sólo para asistir a la cena de despedida de solteros que celebró el viernes Tom Cruise con la pareja y un grupo de amigos.

Medios sensacionalistas como el diario The Sun afirman que el incidente podría haber derivado en una salida del club por parte de Beckham. La boda pone en peligro, señalan, su permanencia en el club. El editorial del Daily Mirror critica al Real Madrid por pretender que se sentara en el partido de esta tarde como si fuera un "apestado niño pequeño".

La amistad de los Beckham y Tom Cruise viene de lejos. El actor visitó el Estadio del Real Madrid cuando por última vez España y realizó un fuerte donativo a la Iglesia de la Cienciología de su propio bolsillo en nombre de David y Victoria.

Por su parte, Victoria, espectacular con un ceñidísimo vestido negro, no necesitó de su marido para brillar como una estrella en la boda de Cruise y Katie Holmes, donde ella fue la más fotografiada.